Cómo es el cónclave que elige al nuevo Papa
Cada vez que muere un Papa, se pone en marcha un complejo métido para elegir a su sucesor. Se convocan a Roma a todos los cardenales del mundo
21 de abril de 2025
La triste noticia de la muerte del Papa Francisco abre múltiples áreas de debate, reflexión y también estricta actualidad periodística.
En ese sentido, ahora se pone en marcha el proceso complejo para elegir a su sucesor.
Se debe conformar el cónclave selecto para que de allí emerja en nombre del nuevo Santo Padre.
Se trata de los cardenales de todo el mundo, que se reunirán en Roma para elegir al nuevo vicario de Cristo. El proceso tiene una serie de procesos especiales.
El colegio cardenalicio lo conforman la actualidad 253 purpurados. De los cuales, sólo 153 tienen derecho a voto para este paso tan trascendental. Se reunirán en la Capilla Sixtina, para en su interior, deliberar y votar - en series de dos por día - para votar por el sucesor de Francisco I.
Cuando un candidato logra la mayoría absoluta se lo proclama como el nuevo jefe de la Iglesia. La feligresía católica - y también curiosos - se enteran del resultado de la votación por medio de la "fumata". Se instala una pequeña chimenea en la capilla con los frescos de Miguel Ángel.
Ante cada votación, se queman las papeletas con los nombres propuestos. Si el humo, "la fumata" es negro, no hay definición. Cuando por la pequeña chimenea emerge el humo blanco ("Fumata bianca") la gente estalla de júbilo. Es que el cónclave ya designo - iluminados por el Espíritu Santo - al nuevo jefe de la Iglesia Católica.
Momentos más tarde, el Papa electo, aparece por primera vez ante el mundo desde un balcón de la Basílica de San Pedro.
El Cónclave papa, una institución desde 1276 para elegir al Papa
El cónclave papal de enero de 1276 (21 a 22 de enero) fue la primera elección papal celebrada bajo las normas de la constitución "Ubi periculum" ("En caso de peligro", en latín) emitida por el Papa Gregorio X en 1274, que establecía las normas para los cónclaves papales.
Pro a casi 800 años de ese momento, la ceremonia para elegir a un nuevo Papa tuvo muchos cambios. En la actualidad el colegio cardenalicio se compone:
252 cardenales en todo el mundo
128 tiene derecho a voto en el cónclave (menores de 80 años)
El papa Francisco, tuvo en sus 12 años de reinado, el tiempo suficiente para nombrar a la mayoría de los purpurados que se reunirán en el seno de la Capilla Sixtina.
De los 253 cardenales:
41 fueron consagrados por Juan Pablo II
62 por Benedicto XVI
149 por Francisco I
Ya comenzó la tarea de notificar a todos los cardenales del mundo por la muerte del pontífice y decirles que deben viajar a Roma para participar del cónclave.
Para los cardenales comienza uno de los momentos más importantes de su vida. Tienen la enorme responsabilidad de reunirse solo entre ellos, aislados del mundo, en el interior de la Capilla Sixtina, para elegir al nuevo Papa.
Los prelados, a su arribo a En Vaticano, se instalan en la residencia de Santa Marta, la misma que eligió Francisco para vivir durante estos 12 años.
Una vez concluidas las ceremonias por el luto, velatorio y las exequias del Papa Francisco, se inicia el momento decisivo: el cónclave para elegir al nuevo Papa. Etapa que se inicia con una frase muy especial.
Cuando la capilla Sixtina está reacondicionada para alojar las deliberaciones cardenalicias - instalar los bancos para los cardenales, las papeletas para votar, la urna, la mesa sobre la que se hace el recuento y la chimenea para anunciar la elección del papa, llega el momento del aislamiento para los prelados.
Estos son los pasos:
Se celebra una Misa "Pro Eligendo Pontifice" en la Basílica de San Pedro. Los cardenales entran en la Capilla Sixtina Entonces, el maestro de ceremonias conduce a los cardenales hasta las puertas de la Capilla Sixtina. Una vez que ingresaron todos, pronuncia la frase latina: "Extra Omnes" ("Afuera todos" ) y cierra con llave la capilla. Los cardenales realizarán las primeras dos votaciones para suceder a Francisco.
La Capilla Sixtina solo se abre dos veces por día. Luego de las votaciones matinales y lo mismo, tras las votaciones vespertinas. Los cardenales tienen un destino concreto. Regresan a la casa de Santa Marta para almorzar o cenar - según el caso y descansar. Deben estar aislados del mundo exterior por completo.
Así serán los días hasta que uno de los cardenales logre tener los dos tercios de los votos de sus colegas.
Cuando se tenga el nombre, el cardenal elegido como Papa deberá responder si acepta esa responsabilidad.
Entonces surgirá un aplauso cerrado dentro de la Capilla Sixtina.
Se le preguntará el nombre con el que llevará adelante su papado
La fumata blanca anuncia al mundo la elección del sucesor de Pedro
Se le colocará el atuendo blanco que distingue a los papas (hay tres juegos de talles, porque no se sabe de antemano, quién será el elegido)
Poco tiempo después, aparece por primera vez en el balcón de la Basílica de San Pedro.
Cada vez que finaliza la votación (mañana o tarde) se queman las papeletas con el colorante que da el tono negro o blanco de la chimenea de la Capilla Sixtina.
Cuando haya una fumata blanca, el mundo sabrá que el sucesor de Francisco habrá sido elegido.