La joven tenía 21 y por el caso está detenido un compañero de facultad. Murió asfixiada, pero su cuerpo tenía golpes y también intentaron quemarlo
En medio de la conmoción por el caso de Catalina Gutiérrez, la joven de 21 años hallada asesinada dentro de un auto en el barrio Ampliación Kennedy, en la periferia sur de la ciudad de Córdoba, se conocieron las datos preliminares de la autopsia.
La causa de muerte fue asfixia por estrangulamiento. El cuerpo tiene golpes y quemaduras.
Por el crimen se encuentra detenido Néstor Soto (21), un amigo de la víctima y que cursaba con ella la carrera de Arquitectura en la Universidad Nacional de Córdoba.
El fiscal José Mana lo imputó por homicidio simple. Está detenido en el Establecimiento Penitenciario N° 9, de donde sería enviado a la cárcel de Bouwer.
En Tribunales entienden que Catalina fue víctima de un crimen por violencia de género, y el caso pasará a una fiscalía de Violencia Familiar ante la sospecha clara de que se trató de un femicidio. En ese sentido, todo indica que la imputación en contra de Soto se agravará a esa figura penal.
La sospecha más fuerte es que su compañero de la facultad la habría asesinado en la noche del miércoles luego de que ella lo pasara a buscar por su casa en el Renault Clio que le pidió prestado a su madre para ir a jugar al bowling con sus amigas y su novio en el Patio Olmos, un conocido shopping.
Según informan medios cordobeses, los investigadores creen que el detenido habría querido mantener un encuentro con ella y, en esas circunstancias, la asesinó. En la mañana de este viernes aún no estaba confirmado que el detenido, como trascendió, hubiera confesado el crimen.
La hipótesis es que Soto la habría golpeado y estrangulado en su domicilio.
Por el momento no se pudo determinar si el estrangulamiento fue realizado con las manos o mediante otro elemento.
Los médicos forenses detallaron que el cuerpo presentaba múltiples lesiones en diferentes aéreas. También posee quemaduras, que se habrían producido luego del deceso. Los primeros resultados no indicarían que haya sido víctima de violencia sexual.
El sospechoso habría cargado el cuerpo en el Renault Clio y lo habría trasladado a un descampado ubicado a un par de cuadras en Ampliación Kennedy. En el lugar habría intentado prender fuego el coche con alcohol para ocultar pruebas.