Fue la única voz que se escuchó en los pasillos del estadio Bicentenario de San Juan. El entrenador Javier Mascherano dio la cara en medio de la tristeza de los jugadores de la Selección Argentina, visiblemente afectados por la temprana eliminación en el Mundial de Sub 20.

Y el santafesino, que se había alejado del cargo después que en enero no consiguió clasificar por mérito deportivo a esta cita, no anduvo con vueltas a la hora de hablar sobre la continuidad del proyecto.

"(El presidente de AFA) Chiqui Tapia tiene todos los días mi renuncia en el escritorio. Voy a seguir si creen que puedo aportar cosas. Hoy no merecimos quedar eliminados", respondió el 'Jefecito', de 38 años, en conferencia de prensa en la zona mixta donde lo rodearon los medios argentinos.

Y completó: "Hablo seguido con Chiqui. Cuando él piense que no tengo que seguir, me iré a mi casa contento. Yo estoy tranquilo y con ganas de seguir. No tengo ambición de dirigir en Primera. Me siento muy cómodo dirigiendo a chicos de esta edad. Es el mejor lugar en el que podría estar"

Sobre el partido, Mascherano lamentó la gran cantidad de situaciones de peligro que la Argentina generó y desperdició, porque esa falta de efectividad la terminó pagando caro cuando Nigeria acertó una de las pocas en las que estuvo cara a cara con el arquero Gomes Gerth.

"Sabíamos que si cometíamos errores y descuidos, lo podíamos pagar. Hicimos el partido que debíamos hacer, pero lamentablemente los dos descuidos terminaron siendo los dos goles de ellos. El equipo lo intentó de todas maneras, por todos los medios", analizó el DT, mientras los nigerianos pasaban por la zona mixta haciendo un trencito de alegría, que contrastaba con la desazón de los argentinos.

Mascherano elogió a su plantel al señalar que "dejaron todo" y graficó la eliminación en que "el fútbol es así, a veces te da, a veces te quita y hay que felicitar a Nigeria por el pase a la otra ronda".

"Creo que lo siempre dijimos, hay que entender que en este juego el merecimiento no tiene nada que ver con el resultado, los chicos deberán levantar la cabeza y seguir con sus clubes porque la vida sigue", resumió.