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Resultados del campamento sanitario
2 de marzo de 2009
Durante el mes de enero, casi 9.000 personas se hicieron los controles gratuitos en la carpa sanitaria que el Ministerio de Salud de la Nación dispuso en la playa Las Toscas de Mar del Plata durante la temporada de verano.
Según los datos obtenidos, 1 de cada 5 personas no había ido al médico en los últimos dos años, y el 77,6% de los que no habían consultado se enteró en el puesto sanitario del Ministerio de Salud de la Nación que tenía una alteración que podría provocarle una enfermedad cardiovascular en el futuro.
“Con estas acciones queremos generar una cultura de prevención de la salud”, señaló la ministra Graciela Ocaña, quien alentó a las personas a realizar consultas periódicas con los profesionales.
Los especialistas del Programa “Cuidarse en salud”, en el marco del cual se instaló el campamento sanitario el pasado 3 de enero, encontraron cifras reveladoras en relación a los diferentes factores de riesgo cardiovascular analizados: peso y altura (IMC = índice de masa corporal), tensión arterial, colesterol, glucemia (azúcar en sangre) y hemoglobina. De las 8.818 personas que pasaron por el puesto sanitario, 8 de cada 10 (el 81,5%) tenían alterado el valor de algún factor de riesgo cardiovascular.
“Por eso es fundamental que las personas conozcan sus niveles de cada factor de riesgo y pongan en práctica buenos hábitos de salud para prevenir las enfermedades cardiovasculares”, agregó Ocaña.
Entre 300 y 400 personas –con un promedio de 52 años- pasaron cada día de enero por el campamento sanitario. Los agentes sanitarios descubrieron que 3 de cada 4 mujeres mayores de 45 años tenían alto el índice de masa corporal, lo que significa que el 69% registró sobrepeso. En cuanto a los hombres de esa edad, el 79% mostraba esos signos.
El Índice de Masa Corporal se obtiene al relacionar el peso con la altura de una persona. Si el IMC es alto, la persona tiene algún grado de sobrepeso que aumenta sus chances de padecer un evento cardiovascular. En el extremo de la delgadez, las diferencias entre los sexos resultaron mayores. Mientras 1 de cada 5 mujeres menores de 45 años mostró poco peso (bajo IMC), apenas 1 de cada 178 varones menores de 45 años tuvo bajo índice de masa corporal.
Los médicos, enfermeros y estudiantes de medicina, nutrición y enfermería que participaron de los controles en Mar del Plata detectaron además que el 40% de los hombres tenían baja la hemoglobina, un indicador de posible anemia.
Igualmente llamativo resultó encontrar más colesterol alto en las mujeres que en los varones (50,2% vs. 30%). El colesterol elevado es uno de los factores que puede llevar a infartos cardíacos y ateroesclerosis.
La tensión arterial fue elevada en el 40,6% de los hombres mayores de 45 años, una proporción más alta que en las mujeres de este grupo (27,8%). La presión alta también resultó más frecuente en los varones menores de 45 años que en las mujeres de esta edad. Aunque una sola medición no alcanza para diagnosticar hipertensión, los especialistas aconsejaron a los que tenían valores alterados consultar al médico.
En cuanto al azúcar en sangre (glucemia), los hombres con valores alterados duplicaron a las mujeres después de los 45 años. El aumento de la glucemia puede ser un indicador de diabetes, y también puede comprometer el funcionamiento del corazón, los riñones, los ojos y los miembros inferiores.
Cada factor de riesgo alterado aumenta la probabilidad de padecer un problema cardiovascular. Por ejemplo, el colesterol elevado aumenta 3,25 veces las chances de padecer un infarto. La hipertensión multiplica las probabilidades por 2,91, y los diabéticos tienen 2,37 veces más probabilidades de infartarse que si no tuvieran la glucemia alta. Cada año, en la Argentina mueren por enfermedades cardiovasculares 242 personas cada 100.000 habitantes, según datos oficiales correspondientes al año 2007. Muchas de esas muertes podrían prevenirse controlando los factores de riesgo y cambiando los hábitos de vida.
Los valores obtenidos en los controles del Ministerio de Salud de la Nación no deben ser tomados como diagnósticos. Lo importante es que permiten orientar a las personas que tienen valores alterados en sus factores de riesgo cardiovascular y fomentar la adopción de hábitos saludables. A su vez, se les informa sobre los centros sanitarios donde pueden consultar si es necesario.
Según los datos obtenidos, 1 de cada 5 personas no había ido al médico en los últimos dos años, y el 77,6% de los que no habían consultado se enteró en el puesto sanitario del Ministerio de Salud de la Nación que tenía una alteración que podría provocarle una enfermedad cardiovascular en el futuro.
“Con estas acciones queremos generar una cultura de prevención de la salud”, señaló la ministra Graciela Ocaña, quien alentó a las personas a realizar consultas periódicas con los profesionales.
Los especialistas del Programa “Cuidarse en salud”, en el marco del cual se instaló el campamento sanitario el pasado 3 de enero, encontraron cifras reveladoras en relación a los diferentes factores de riesgo cardiovascular analizados: peso y altura (IMC = índice de masa corporal), tensión arterial, colesterol, glucemia (azúcar en sangre) y hemoglobina. De las 8.818 personas que pasaron por el puesto sanitario, 8 de cada 10 (el 81,5%) tenían alterado el valor de algún factor de riesgo cardiovascular.
“Por eso es fundamental que las personas conozcan sus niveles de cada factor de riesgo y pongan en práctica buenos hábitos de salud para prevenir las enfermedades cardiovasculares”, agregó Ocaña.
Entre 300 y 400 personas –con un promedio de 52 años- pasaron cada día de enero por el campamento sanitario. Los agentes sanitarios descubrieron que 3 de cada 4 mujeres mayores de 45 años tenían alto el índice de masa corporal, lo que significa que el 69% registró sobrepeso. En cuanto a los hombres de esa edad, el 79% mostraba esos signos.
El Índice de Masa Corporal se obtiene al relacionar el peso con la altura de una persona. Si el IMC es alto, la persona tiene algún grado de sobrepeso que aumenta sus chances de padecer un evento cardiovascular. En el extremo de la delgadez, las diferencias entre los sexos resultaron mayores. Mientras 1 de cada 5 mujeres menores de 45 años mostró poco peso (bajo IMC), apenas 1 de cada 178 varones menores de 45 años tuvo bajo índice de masa corporal.
Los médicos, enfermeros y estudiantes de medicina, nutrición y enfermería que participaron de los controles en Mar del Plata detectaron además que el 40% de los hombres tenían baja la hemoglobina, un indicador de posible anemia.
Igualmente llamativo resultó encontrar más colesterol alto en las mujeres que en los varones (50,2% vs. 30%). El colesterol elevado es uno de los factores que puede llevar a infartos cardíacos y ateroesclerosis.
La tensión arterial fue elevada en el 40,6% de los hombres mayores de 45 años, una proporción más alta que en las mujeres de este grupo (27,8%). La presión alta también resultó más frecuente en los varones menores de 45 años que en las mujeres de esta edad. Aunque una sola medición no alcanza para diagnosticar hipertensión, los especialistas aconsejaron a los que tenían valores alterados consultar al médico.
En cuanto al azúcar en sangre (glucemia), los hombres con valores alterados duplicaron a las mujeres después de los 45 años. El aumento de la glucemia puede ser un indicador de diabetes, y también puede comprometer el funcionamiento del corazón, los riñones, los ojos y los miembros inferiores.
Cada factor de riesgo alterado aumenta la probabilidad de padecer un problema cardiovascular. Por ejemplo, el colesterol elevado aumenta 3,25 veces las chances de padecer un infarto. La hipertensión multiplica las probabilidades por 2,91, y los diabéticos tienen 2,37 veces más probabilidades de infartarse que si no tuvieran la glucemia alta. Cada año, en la Argentina mueren por enfermedades cardiovasculares 242 personas cada 100.000 habitantes, según datos oficiales correspondientes al año 2007. Muchas de esas muertes podrían prevenirse controlando los factores de riesgo y cambiando los hábitos de vida.
Los valores obtenidos en los controles del Ministerio de Salud de la Nación no deben ser tomados como diagnósticos. Lo importante es que permiten orientar a las personas que tienen valores alterados en sus factores de riesgo cardiovascular y fomentar la adopción de hábitos saludables. A su vez, se les informa sobre los centros sanitarios donde pueden consultar si es necesario.