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Argentina tiene recambio, se puede confiar
22 de julio de 2007
Cuando todo parecía que se derrumbaba tras la final de la Copa América y la estrepitosa goleada frente a Brasil por 3-0, llegó el aire fresco de la juventud, para hacernos recordar que esta tierra que respira fútbol está viva, que hay recambio, que se puede confiar en un futuro prometedor.
Lo demostrado por los chicos del Sub 20 de Hugo Tocalli no tiene más que palabras de elogios, por la entrega, el juego, la entereza y esa actitud que hace ver que se puede tener un equipo con todas las letras.
La humildad de jugadores consagrados como el "Kun" Agüero, estrella en España y sin embargo dispuesto a ponerse la celeste y blanca en otro torneo Sub 20, o el impresionante torneo que jugó el pequeño-gigante Maxi Moralez, que hacen pensar en un Racing prometedor, fueron sólo dos de los claro ejemplos de esa condición.
También están el campeón con Boca Ever Banegas, el cotizado goleador Mauro Zárate, a quien no le importó que haya sido vendido a Qatar en 20 millones de dólares y sin embargo se fue hasta Canadá para dar el gol del triunfo.
Seguramente aquellos jugadores que decidieron no sumarse a este equipo, o ante los "consejos" de sus allegados, ahora estarán lamentándose por no poder haberse subido a la gloria.
Desde hace 12 años Argentina domina la categoría, ya que desde 1995 consiguió cinco titulos mundiales, algo que no se vio reflejado en la mayor, que desde hace 14 años no consigue un logro resonante.
Esta situación deberá ser analizada. Los chicos piden pista y si bien la selección mayor actual cuenta con varios de estos "juveniles", como los casos de Riquelme, Aimar, Cambiasso, Burdisso, Messi o Gago, habrá que hacer algún replanteo de cara al futuro.
Lo esperanzador es ver que el fútbol argentino sigue produciendo jugadores que sienten la pasión por el juego, que no es algo aislado, sino un trabajo arduo, de largo alcance que da sus frutos y tiene más mérito aún.
En las gambetas de cualquiera de los chicos que se consagraron en Canadá 2007 pueden recordarse algunas cosas que en su tiempo hicieron grandes como Maradona, Alonso o el propio Bochini. El ADN del fútbol argentino es ese y la gloria, no tiene precio.
Lo demostrado por los chicos del Sub 20 de Hugo Tocalli no tiene más que palabras de elogios, por la entrega, el juego, la entereza y esa actitud que hace ver que se puede tener un equipo con todas las letras.
La humildad de jugadores consagrados como el "Kun" Agüero, estrella en España y sin embargo dispuesto a ponerse la celeste y blanca en otro torneo Sub 20, o el impresionante torneo que jugó el pequeño-gigante Maxi Moralez, que hacen pensar en un Racing prometedor, fueron sólo dos de los claro ejemplos de esa condición.
También están el campeón con Boca Ever Banegas, el cotizado goleador Mauro Zárate, a quien no le importó que haya sido vendido a Qatar en 20 millones de dólares y sin embargo se fue hasta Canadá para dar el gol del triunfo.
Seguramente aquellos jugadores que decidieron no sumarse a este equipo, o ante los "consejos" de sus allegados, ahora estarán lamentándose por no poder haberse subido a la gloria.
Desde hace 12 años Argentina domina la categoría, ya que desde 1995 consiguió cinco titulos mundiales, algo que no se vio reflejado en la mayor, que desde hace 14 años no consigue un logro resonante.
Esta situación deberá ser analizada. Los chicos piden pista y si bien la selección mayor actual cuenta con varios de estos "juveniles", como los casos de Riquelme, Aimar, Cambiasso, Burdisso, Messi o Gago, habrá que hacer algún replanteo de cara al futuro.
Lo esperanzador es ver que el fútbol argentino sigue produciendo jugadores que sienten la pasión por el juego, que no es algo aislado, sino un trabajo arduo, de largo alcance que da sus frutos y tiene más mérito aún.
En las gambetas de cualquiera de los chicos que se consagraron en Canadá 2007 pueden recordarse algunas cosas que en su tiempo hicieron grandes como Maradona, Alonso o el propio Bochini. El ADN del fútbol argentino es ese y la gloria, no tiene precio.