Cinco derrotas consecutivas no son motivos suficientes para que Diego Cagna deje su cargo como técnico de Tigre, anteúltimo en el torneo y eliminado de la Copa Sudamericana.

El conjunto de Victoria atraviesa su peor momento desde que regresó a Primera, a medidados de 2007, y luego de haber sido protagonista en los anteriores torneos, en los que peleó el campeonato hasta la última fecha.

Ayer, los rumores de renuncia se colaban en la primera plana de la realidad de Tigre, pero hoy el técnico desmintió esa versión: "Nunca pensé en renunciar. El día que lo haga los primeros que lo van a saber serán los jugadores. Pero si me quedé en las buenas, cómo no voy a quedar en las malas", manifestó.

Las causas del mal momento del "Matador" se deben al desgaste que existe en la relación de los jugadores con el técnico que, lejos de ser mal, se ha vuelto monótona y contraproducente para los objetivos deportivos del club, a la vez que protagonistas de los buenos momentos como Martín Morel, Matías Giménez y Diego Castaño han bajado notablemente el nivel de sus rendimientos.

Pese al momento, Cagna, end esacuerdo con los rumores ya mencionados, dijo: "A mí me molesta que pongan en mi boca cosas que yo no dije ni hice".

El próximo viernes, Tigre visitará a Independiente en cancha de Lanús. Una nueva derrota, finalmente, decantaría en la salida del técnico, pese a sus ganas de quedarse.