El boxeador mexicano Marco Antonio Nazareth murió hoy en un hospital del estado de Jalisco cuatro días después de perder por nocaut ante Omar Chávez, hijo de la leyenda del boxeo mexicano Julio César Chávez.

Nazareth, de 23 años, había ingresado al hospital Amerimed de Puerto con un derrame cerebral producto, en parte, de los golpes que recibió en el combate. Pese a ser operado el mismo sábado, su condición empeoró progresivamente.

Los médicos habían pronosticado que sólo después de 72 horas de la intervención se podía hacer un pronóstico sobre la evolución del peleador, y poco después de cumplirse ese plazo señalaron que su estado era muy crítico porque sólo el 10 por ciento de su cerebro funcionaba.

No hubo milagro, lamentablemente, y el mundo del boxeo llora a Nazareth. "Hemos orado mucho mi familia y yo por Marco. Me siento muy mal, triste, confundido y con muchas preguntas. Quiero decirle a la familia y amigos de Marco que lo siento muchísimo, estamos con ellos y estamos a su disposición siempre", expresó Chávez, a través de un comunicado.