La red de cardiólogos que dispuso el Ministerio de Salud a nivel nacional para la detección de cardiopatías congénitas logró aumentar en un 11 por ciento la cantidad de casos diagnosticados, para poder revertirlos a tiempo.Así lo informó la responsable del Centro Coordinador de Cardiopatías Congénitas, Alejandra Valle, durante un encuentro realizado por la cartera de Sanidad en la ciudad de Buenos Aires, donde se evaluó la atención de cardiopatías dentro del Plan Nacer.

Las cardiopatías congénitas son los problemas que se presentan en la estructura y funcionamiento del corazón, debido a un desarrollo anormal del músculo antes del nacimiento y que pueden requerir de una cirugía temprana. Valle destacó que "a través del Programa Nacional de Cardiopatías Congénitas se detectaron el año pasado 1.348 casos y hay 1.528 a octubre de 2011, lo que significa una mejora en el diagnóstico, para poder intervenir desde el punto de vista cardiológico".

La funcionaria añadió que esas cifras "representan un aumento del 11 por ciento con respecto al año anterior, pero también significó la realización de una mayor cantidad de cirugías, sobre todo en menores de un año, para poder atender las distintas patologías".

Precisó que "a través del trabajo de la red de cardiólogos en el país se evalúa la complejidad de la patología y se establecen los criterios de diagnóstico y tratamiento".

En ese sentido, Valle indicó que "también se evalúan cuestiones vinculadas al traslado para poder realizar cirugías cardiovasculares, ante lo extenso que es el país y también se tienen en cuenta lo problemas sociales de cada región".

El balance del programa arrojó que la mayoría de los pacientes quirúrgicos en la red son atendidos en el Hospital Garrahan de la ciudad de Buenos Aires, el Sor María Ludovica de La Plata, el Instituto de Cardiología de Corrientes y el Hospital Posadas de Buenos Aires.

Guillermo González Prieto, subsecretario de Salud Comunitaria de la Nación, destacó que "con estos programas el Estado está dando una respuesta efectiva a tiempo, ante la detección de las cardiopatías congénitas".

González Prieto rescató "la labor de la red de cardiólogos a nivel nacional con la que cuenta el Ministerio para evaluar, diagnosticar y dar viabilidad a las cirugías cardiovasculares, en una población tan sensible como niños y adolescentes".

Aclaró que la asistencia está abocada "fundamentalmente a la población sin obra social" e insistió, en que "la respuesta sanitaria es inmediata una vez realizado el diagnóstico".

La atención de las cardiopatías congénitas es importante sobre todo en el primer año vida, donde aumenta el riesgo de muerte. Los datos oficiales indican que la mortalidad por cardiopatías detectadas en niños y adolescentes en el país es del 6 por ciento de los casos. Las cardiopatías congénitas no tratadas en la niñez o en la adolescencia pueden causar diversos trastornos cardiovasculares en la edad adulta, que podrán llegar a requerir de cirugías.