En el estado de Colorado, Estados Unidos, se ha puesto en práctica un sistema que permite determinar la terneza de la carne mucho antes de que llegue al cuchillo del consumidor.

Esta nueva tecnología permite medir cuan tierna es la carne en pleno proceso de elaboración a través de un sistema infrarrojo, que no es invasivo y no produce problemas en los tejidos.

Con el uso de estos aparatos, se cree, se podrá determinar precios especiales para aquellos cortes que estén determinados como tiernos antes de que lleguen a las góndolas y asi los clientes podrán saber que llevan un producto garantizado.