La idea la lanzó el gobernador mendocino Julio Cobos, el nominado para acompañar en la fórmula presidencial a Cristina Fernández de Kirchner, y rápidamente la tomaron otras provincias: cortar la electricidad a hogares y forzar a un ahorro en los comercios para privilegiar el abastecimiento a las industrias.

El problema es que para llevar a cabo el plan necesitan la autorización de la Secretaría de Energía de la Nación.

Por ahora, la administración de Néstor Kirchner no dio ninguna muestra de que va a aceptar la fotografía de apagones rotativos y programados en plena campaña electoral para la Presidencia de Nación.

Las provincias no pueden actuar en forma autónoma porque el ahorro que generan quedaría a disposición del Sistema Nacional Interconectado que administra la empresa mixta Cammesa.

"Si cada mendocino colabora con un ahorro de 10% de la energía que consume, no necesitamos restringir a la industria", dijo esta semana Cobos.

Los industriales mendocinos elaboraron el plan "Prorratear y racionalizar el ahorro entre todos" que elevaron a la ministra de Economía, Laura Montero, para que esta semana lo presente al secretario de Energía, Daniel Cameron.

La idea de Cobos fue tomada ayer por Corrientes, gobernada por otro radical K, Arturo Colombi.

El subsecretario provincial de Energía, Marcelo Gatti, adelantó que esta semana se remitirá un informe a la Nación a fin de solicitar autorización para aplicar restricciones en el suministro de luz eléctrica en domicilios.

El funcionario afirmó que "la situación es complicada" y que si se aplicaran los bloqueos energéticos a pequeños usuarios, "será para aliviar a los grandes".

Alrededor de 40 Grandes Usuarios Industriales (madereras y yerbateras) sufren restricciones en su abastecimiento eléctrico de 16 a 24 horas.

Salta y Catamarca también expresaron la intención de repartir la carga del ahorro entre los residenciales y el comercio y que no todo recaiga sobre la industria.