Tras el escándalo generado luego del regreso de Brasil, Boca debió jugar su partido con Banfield de la segunda fecha de la Liga Profesional con el equipo de la Reserva.
Los pibes habían disputado su compromiso ante la reserva del propio Taladro nada más que 24 horas antes.
Jugaron un enorme partido, fueron superiores en buena parte de los 90 minutos e hicieron los méritos necesarios para llevarse el triunfo, aunque terminaron empatando 0-0.
Los futbolistas del primer equipo xeneize atraviesan un período de aislamiento tras regresar de Brasil, donde según las autoridades argentinas rompieron la burbuja sanitaria.

Y los juveniles le cubrieron las espaldas a la perfección y fueron felicitados por el presidente de Boca, Jorge Ameal.
"Felicitaciones a los jugadores y al cuerpo técnico de la Reserva que nos hicieron sentir orgullosos a todos los hinchas de Boca. Eso es pertenencia. Eso es amor por estos colores. Eso es identidad xeneize. Gracias", escribió Ameal en twitter apenas terminó el partido.
A excepción de Kevin Duarte, quien fue reemplazado por Ezequiel Fernández, el resto del equipo titular que dispuso Sebastián Battaglia (tomó el lugar de Miguel Ángel Russo, también aislado), fue el mismo que el viernes venció 3-1 al Taladro por el torneo de Reserva, con goles de Vicente Taborda, en dos ocasiones, e Israel Escalante.

Boca, que prescindió de Edwin Cardona para afrontar este partido, pese a que el colombiano no formó parte del equipo que quedó eliminado de la Copa Libertadores ante Atlético Mineiro en Brasil, jugó un partido de igual a igual ante Banfield en el estadio Florencio Sola.

De hecho, el esfuerzo supremo que realizaron sus jóvenes futbolistas, la mayoría de ellos debutantes en Primera División, quedó cristalizado en la lesión muscular que sufrió Ezequiel Almirón antes de cumplirse la primera media hora de juego (lo sustituyó Érik Bodencer).

De todos modos, esa actitud llevó al conjunto Xeneize a elaborar las acciones más peligrosas de la mitad inicial. Con intensidad, disciplina y orden, Boca intentó un par de veces de media distancia y estuvo cerca de convertir.

Banfield, por su parte, no pudo imponer su mayor experiencia en Primera División. Pocas veces pudo ser profundo y la mayor cantidad del tiempo corrió detrás de un rival que trasladó bien el balón. Su llegada más clara fue un cabezazo que rechazó hacia un costado Agustín Lastra.

El segundo tiempo, ya con la lluvia como gran protagonista, fue la continuidad del primero: Banfield no encontró la llave hacia el arco local. Los dirigidos por Battaglia, con soltura y aplomo, y pese al partido que disputaron hace poco más de 24 horas, volvieron a complicar a Facundo Altamirano, quien se tuvo que esforzar para contener un disparo de Bodencer.

Finalmente, los pibes Xeneizes se llevaron un empate como premio al esfuerzo, ante un conjunto de Javier Sanguinetti que, pese a insistir hasta el final, quedó en deuda.

Los jóvenes de Boca, con el plantel principal todavía aislado, recibirá el martes a las 21 a San Lorenzo, por la cuarta fecha. Banfield, por su parte, visitará el miércoles a las 14.15 a Unión de Santa Fe.