En la provincia de Buenos Aires existe una enorme preocupación por el crecimiento sostenido de contagios de coronavirus en las últimas semanas, en el interior del distrito.

A diferencia de la primera ola de Covid de 2020 que impactó primero en el AMBA y luego de tres semanas en el resto de la provincia, la segunda pegó al mismo tiempo en ambos escenarios provinciales.

En estos últimos días esta crisis sanitaria quedó desnuda con los picos de ocupación de camas de terapia intesiva en Bahía Blanca y Mar del Plata , con el 80 % y 75%, respectivamente.

Otro claro ejemplo de esta situacióin es la ciudad de Pergamino, donde la ocupación en UTI es casi del 95% y muchos pacientes debieron ser trasladados a localidades vecinas.

En este penoso ranking, la lista la encabeza el Partido de General Pueyrredón ( 69.135 casos), seguido por Bahia Blanca (27.431), Tandil (17.313), Pergamino (13.299), Junín (12.406), San Nicolás (11.501) y por debajo de 10 mil, Balcarce (8.399), Necochea (8.716), Olavarría (7.903) y Chivilcoy (7.479)

En ese punto se estan activando alarmas de emergencia para detectar lugares donde las camas de terapia esten más liberadas, como en el caso de San Miguel del Monte que tiene un 37% de su ocupación disponible.

En este marco critico, no son solo las camas las que estan saturadas sino también los insumos como el oxigeno, anestésicos y relajantes musculares, que deben ser suministrados a pacientes con respirador.

También allí se produce otro problemas con los increíbles aumentos de estos elementos de salud, que según informaron fuentes sanitarias alcanza al 500%, y muhos municipios ya no pueden comprar, sin ayuda del gobierno provincial.

En varios distritos el crecimiento de muertes fue exponencial de abril a mayo, como en le caso de Pergamino, donde de las 40 víctimas de un mes se pasó a 102 al siguiente.

En esa ciudad como en Bahía Blanca y Mar del Plata también se reveló que las edades de fallecimiento bajó a personas con menos de 50 años.

La semana del 16 al 22 de mayo fue en gran parte de la provincia la más critica, pero si bien se estabilizó en días siguientes, la meseta de contagios y muertes qudó muy alta, además de un servicio de salud estresado por las demandas.

Finalmente, como un patron común en muchos distritos lo que se siente es la falta de enfermeros especializados en terapia intensiva, y la demanda hace que muchos trabajen en dos ciudades cercanas para cubrir necesidades, pero con la carga de agoamiento que eso implica.

La esperanza está puesta en un crecimiento de la vacunación masiva que se espera tenga en junio una fuerte acción que permita bajar el números de casos, que en estos días promedia en 14 mil por jornada.

ROB