Una mujer fue procesada con prisión preventiva por la Justicia Federal al ser sindicada como la "organizadora" de una banda de narcotraficantes de nacionalidad
peruana, confirmaron hoy fuentes judiciales.

La resolución fue dictada por el juez federal Jorge Ballestero contra la mujer, conocida como "Doña Lili" o la "narcoabuela", y contra otros ocho integrantes de la gavilla dedicada a cometer delitos, entre ellos la comercialización de estupefacientes, al tiempo que se dictaron además embargos de hasta 500 mil pesos.

Voceros judiciales indicaron que en el extenso fallo el magistrado se refirió a las dificultades que tuvo para obtener testimonios de las personas del lugar como pruebas de los hechos ilícitos, debido a los "códigos de silencio" imperantes en la
villa donde se hicieron los operativos.

Sin embargo, Ballestero destacó que cobraron especial relevancia los dichos de dos testigos de identidad reservada que prestaron declaración en la causa.

"Doña Lili" fue identificada como Lili Lucila Enriquez Alarcón, de 59 años, quien fue detenida a principios de mayo en la villa 1-11-14 del Bajo Flores.

La mujer fue acusada -y ahora quedó procesada- por la presunta comisión del delito de "asociación ilícita", destinada a cometer "amenzas y abuso de armas" y de "comercialización de estupefacientes".

Sin embargo, el magistrado ordenó la libertad de otros 10 supuestos integrantes de la banda, al dictarles "falta de mérito".

En la investigación de la causa, se le adjudica a la mujer el rol de "organizadora" de una de las dos bandas de narcotraficantes peruanos que libran una "guerra" en Buenos Aires y que ya se cobró numerosos muertos.

La imputada resultó ser la suegra de "Marcos", el jefe de la banda dedicada al narcotráfico que llegó a estar preso condenado a más de tres años de prisión, pero luego recuperó la libertad.

"Doña Lili" formaba parte de la estructura criminal investigada desde mayo de 2006, pero recién a comienzos de este año, su rol fue mutando adquiriendo un papel más destacado con la salida de Marcos como cabeza visible de la banda.

La sospechosa fue detenida en un megaoperativo cuando se encontraba junto a una hija y a una nieta, pero "Marcos" logró escapar y se encuentra prófugo.

El grupo enemigo de Marcos lo encabeza Alionzo Rutillo Ramos Mariños, alias "Ruti", acusado de ser el presunto responsable de la masacre del 29 de octubre de 2005, la que murieron cuatro personas y un bebé que participaban de la procesión de El Señor de
los Milagros, en el Bajo Flores.

Ese enfrentamiento de grupos narcos generó el megaoperativo ordenado por el juez Ballestero en el que se detuvo a una veintena de personas, entre ellas, a la suegra de "Marcos".

Ahora, el magistrado consideró que los pocos testimonios obtenidos en la causa "evidencian no sólo un cuadro de marginalidad, violencia y amedrentamiento, sino que, además demuestran a las claras la imposición del silencio de los moradores a cambio de la posibilidad de permanecer en el asentamiento o a cambio directamente de sus vidas".

Asimismo, el juez hizo referencia a las vidas que se cobró la guerra entre narcos, al "poderío" de la banda, y a la situación de las denominadas "mulas", al destacar el "encapsulamiento con cocaína" de personas en Perú que son trasladadas a la Argentina.