En medio de tensiones cruzadas, que incluyeron la publicación de solicitadas y una marcha para pedir por los "presos políticos", el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, salió a rechazar de plano la posibilidad de que Alberto Fernández indulte a referentes kirchneristas detenidos por causas de corrupción, como Milagro Sala o el ex vicepresidente Amado Boudou. “Una amnistía para los casos de corrupción sería absurdo y un gran error”, alertó.

“De mi parte no hay ninguna chance ni de poner en discusión una amnistía, así como creo que el Presidente no tiene ninguna vocación de discutir un indulto. La justicia es quien absuelve o condena”, dijo Massa en una entrevista con el diario El País de España.

En diciembre, agrupaciones kirchneristas realizaron protestas con la consigna "Por una Navidad sin presos políticos", donde pidieron la liberación de ex funcionarios y referentes detenidos por causas de corrupción.

Días atrás, organizaciones sociales realizaron una marcha a los Tribunales para exigir la liberación de la dirigente jujeña de la Tupac Amaru, quien está presa desde 2016, actualmente cumpliendo arresto domiciliario, y con una condena de 13 años, sindicada como jefa de una asociación ilícita.

Este mes también se conoció una carta de un grupo de dirigentes y referentes de los sectores más duros del kirchnerismo que salieron a pedir la "libertad de Amado Boudou", quien fue condenado a cinco años y diez meses por el escándalo Ciccone. Sin embargo, Massa mostró una postura contraria contra esos planteos de un sector del Frente de Todos.

“Creo que no hay ninguna necesidad política y creo que, en todo caso, lo mejor que nos puede pasar es que cada poder del Estado haga su trabajo. El legislativo legislar, la justicia absolver o condenar, y el Ejecutivo llevar adelante la gestión. Tratar una amnistía me suena absolutamente absurdo”, aclaró.

Massa también habló sobre otro tema que genera una grieta puertas adentro del oficialismo: el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.

“Yo mantengo desde hace años que el gobierno venezolano no cumple las pautas democráticas mínimas. El Presidente también ha sido claro en su respaldo al Informe Bachelet y tiene una posición muy clara respecto de la necesidad de que Venezuela camine hacia una democracia a partir de una solución que encuentren los venezolanos con ayuda del resto de las naciones”, sostuvo Massa, quien parece cada vez más alejado de algunas ideas impulsadas por el kirchnerismo duro.