Boca desaprovechó una gran oportunidad de abrochar una victoria y apenas se trajo un empate, 1 a 1, en su debut en el Grupo H de la Copa Libertadores. El equipo de Russo fue superior pero le faltó decisión para definirlo y en un descuido defensivo le sacaron dos puntos claves.

El local se animó de arranque con algunas incursiones por izquierda y a los 9 minutos estuvo cerca de abrir el marcador con un remate de Añor, que Andrada desvió al corner. Pero ese entusiasmo ni siquiera llegó al cuarto de hora, porque en cuanto el Xeneize se acomodó y tomó confianza, fue haciéndose dueño del partido.

Bien parado atrás, sobre todo desde la firmeza de los dos centrales, la visita fue ganando el mediocampo y, desde allí, generando fútbol con algunos pincelazos de Bebelo Reynoso pero fundamentalmente con la velocidad de Villa por derecha. Sin embargo, todo ese dominio le costó traducirlo en llegadas, porque se nubló al llegar al área.

De todas maneras, con esa contundencia que lo caracteriza en la era Russo, en la primera clara que tuvo se puso en ventaja. Fue a los 24 minutos, cuando tras un centro de Villa, apareció Abila en el área y tocó de zurda para el 1 a 0.

Nada parecía complicar a Boca, pero una falta innecesaria de Marcone contra Celis, al borde del área, motivó un tiro libre que Robert Hernández colgó del ángulo derecho, poniendo el 1 a 1 inesperado.

El equipo de Russo sintió el golpe, entró en desorden, y aunque siempre mantuvo la iniciativa le costó encontrar los caminos para desnivelar. Así y todo tuvo una clara con Capaldo y en el final otra nítida con Abila, pero las dilapidó y así se fue con un empate con sabor a poco.