El público decidió que la rosarina se vaya de la casa con el 54,5 por ciento de los votos, mientras que el chef pseudo-italiano, recibió el 45,5 de los sufragios de quienes votaron.

Pero antes de irse, Granata le cantó "las 40" a los demás integrantes de la casa y dijo que se iba "tranquila y relajada".

Las palabras de la modelo desataron un vendaval entre los demás ocupantes de la casa, en especial del cantante Pablo Tamagnini, quien la insultó y la tildó de "loca".

Tras la ida de Granata, Nino Dolce se tiró a la pileta y recibió la reprobación de Gran Hermano, para luego romper en llanto en el baño, dada la angustia que le provocó esperar para saber si seguía o no en la casa.