Los turistas en Key West, un destino muy visitado en los cayos de la Florida, en el sur, ya recibieron una orden de evacuación que se convirtió en obligatoria desde la noche del miércoles, para los 80.000 habitantes de la isla, ante el avance del poderoso huracán "Irma", de categoría 5, el más grande registrado en el Atlántico.

Los habitantes de Miami esperan que el huracán Irma traiga toda su furia a las playas el domingo a primera hora, y ya parece un pueblo fantasma. Ya casi no se consigue agua, latas de comida ni alimentos para animales. Hay largas filas para cargar combustible. Desde anoche, todos los vuelos, hasta para ir a Alaska, están vendidos. Los hoteles del centro y norte de Florida están casi todos sold out.

La gente ha sacado las lanchas y botes del agua, y una larga filas de autos con turistas y residentes ocupa la única ruta que lleva al continente, informó The Washington Post.

Según informa la agencia Associated Press, los residentes de los cayos de la Florida no están dispuestos a correr riesgos ante el potencial devastador de "Irma".

En las redes sociales, se advierte a la gente que si evacua su casa, "no deje a sus mascotas atrás". O "prepárese: llene el tanque de su auto. tenga provisiones de agua y comida para 3/4 días por persona".

En castellano y en inglés, el gobernador de Florida Rick Scott pidió en Twitter hacer caso de las órdenes de evacuación.

La trayectoria de "Irma"