La muerte del militante radical en Jujuy generó la inmediata reacción de los principales referentes de la oposición, quienes reclamaron el esclarecimiento del hecho y vincularon el crimen con el clima de violencia política que sufre esa provincia.

Ariel Velázquez, de 22 años, falleció ayer tras agonizar durante diez días en un hospital de la capital provincial. Había sido baleado el viernes anterior a las PASO luego de repartir boletas. Horas antes de que fuera atacado, la víctima había tenido un altercado con integrantes de la agrupación Tupac Amaru, que lidera Milagro Sala, aliada del gobernador kirchnerista Eduardo Fellner .

El jefe de Gobierno porteño y candidato presidencial del frente Cambiemos, Mauricio Macri , calificó anoche de "realmente grave" el caso del joven. "Es inaceptable lo que le pasó", indicó Macri en diálogo con radio Mitre.

"Es realmente grave, quiero darle las condolencias a la familia de este joven radical", afirmó. Enseguida, agregó: "Creo que más que nunca se trata del cambio que queremos en la Argentina, que nos alejemos de este nivel de intolerancia y violencia, que tiene que ver con un nivel de totalitarismo y autoritarismo para ejercer el poder que no tiene que ver con una convivencia en la pluralidad y diversidad".

En un mensaje publicado en Twitter, la postulante presidencial del frente Progresistas, Margarita Stolbizer , también hizo llegar sus condolencias a la familia de la víctima.

El fallecimiento del joven causó una fuerte conmoción en Jujuy y sacudió la campaña. El candidato a gobernador de la UCR, Gerardo Morales , dispuso un duelo y el cese de actividades partidarias por 48 horas.

En declaraciones radiales, el senador pidió hoy al gobierno nacional "no desviar" ni "garantizar impunidad" por el crimen del militante de Velázquez y alertó sobre supuestas "irregularidades" en el proceso de investigación del caso.