A pocos días de protagonizar un fuerte cruce, la presidenta Cristina Fernández recibió esta tarde al titular de la Conferencia Episcopal José María Arancedo en la quinta de Olivos.

El encuentro ocurrió luego de que los obispos difundieran un severo comunicado en el que señalaron que "la Argentina está enferma de violencia" y hablaron del "cáncer de la corrupción".

Durante un acto, Cristina Fernández había respondido a las críticas, aunque no mencionó directamente al texto de la Conferencia Episcopal. Durante la conmemoración del 40° aniversario del asesinato del padre Carlos Mugica, la Presidenta contrastó la actualidad "pacífica" del país con "la Argentina violenta en la que nació Mugica, donde se dirimieron las cosas a los tiros y con bombardeos".

Y agregó: "Cuando hablan de una Argentina violenta, quieren reeditar viejos enfrentamientos".