Más de 2.400 obras de arte fueron halladas durante un allanamiento realizado en un galpón de la localidad bonaerense de Témperley.

Se trata en su mayoría de obras de la fallecida pintora y grabadora Nelia Licenziato, que fueron apropiadas mediante maniobras fraudulentas por una organización que se dedicaba a usurpar propiedades y fraguar herencias.

En el allanamiento también se encontró un cuadro atribuido a Benito Quinquela Martín.

Si bien la policía valuó a las obras rescatadas en más de un millón de dólares, el conocido especialista y marchand Ignacio Gutiérrez Zaldívar consideró disparatado ese monto ya que no se trata de una artista consagrada.

El procedimiento, en el que no hubo detenidos, fue realizado por la DDI Lomas de Zamora en un inmueble ubicado en Colón al 130 de esa localidad del sur del conurbano, donde las obras estaban ocultas y acondicionadas para que no se vieran afectadas por la humedad.

En el galpón se había levantado una suerte de pared falsa para disimular el sector donde se ocultaban las obras, unas 600 de las cuales estaban enmarcadas.

La policía intenta determinar si el cuadro de Quinquela hallado es original y fue conseguido de manera ilegal.

La banda responsable de la apropiación estaba liderada por un operador inmobiliario de la zona sur del conurbano en cuya lujosa residencia particular poco tiempo atrás, en otro allanamiento, se habían hallado 35 obras de la misma artista.

El sujeto se encuentra imputado en la causa pero se mantiene en libertad.

Nelia Licenziato murió en 2007 y su nombre llegó a las crónicas policiales el año pasado cuando una investigación permitió desbaratar a una banda de "usurpadores VIP" que ocupaban viviendas de lujo ante el fallecimiento de sus ocupantes para luego venderlas.