Mientras ya se produjeron un muerto y 25 heridos durante saqueos en Concordia, el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, calificó de "sedición" a la protesta policial en reclamo de aumentos salariales.

Urribarri dijo que los manifestantes con "unos cincuenta" policías "en su mayoría con malos antecedentes en sus legajos" y rechazó la posibilidad de negociar con los uniformados.

Tras los disturbios registrados anoche, la protesta continuaba frente a las dependencias policiales de Concordia.

Urribarri señaló que se trasladó a la ciudad donde se registraron los episodios a la 1.15 de esta madrugada y que esta mañana la situación se encontraba controlada.

El mandatario oficialista confirmó que "un joven de 22 años que estaba saqueando un comercio" de electrodomésticos "quedó electrocutado", en tanto que unas "25 personas fueron heridas con vidrios, algunos con disparos".

Urribarri apuntó contra los uniformados que protestan, confirmó que ya inició acciones legales y advirtió que no negociará con ese sector porque protagonizan "una sedición", según dijo.

También dijo que la Provincia hizo denuncias judiciales contra quienes cometieron saqueos, así como contra "tiradores" que provocaron heridas de armas de fuego.

Urribarri confirmó que la Policía tendrá una actualización salarial que estaba "prevista" y que es "lo que la Provincia puede pagar".

"Esto es el efecto Córdoba", enfatizó el mandatario oficialista, al apuntar contra su par José Manuel de la Sota y señalar que por las protestas policiales en esa provincia se desataron más manifestaciones.

Para Urribarri "no es ilógico" que los gobernadores puedan mantener una reunión en conjunto aunque advirtió: "Ocurre que no todos somos iguales".

"La gran mayoría (de los gobernadores) vamos a seguir haciendo una apuesta muy fuerte a la racionalidad, dios quiera que seamos todos", advirtió.