Un paro sorpresivo en cinco de las siete líneas de ferrocarriles metropolitanos provocó hoy un caos en el transporte metropolitano y obligó a cientos de miles de personas a buscar vías alternativas para llegar a sus casas y soportar colas de hasta cuatro horas.

El paro lo lanzó el gremio La Fraternidad, que denunciaron la falta del pago del aguinaldo.

Pero la decisión llamó la atención en medio de un conflicto de los ferroviarios con el Gobierno nacional por la seguridad en el servicio ferroviario y la instalación de cámaras en las cabinas de las formaciones.

En Constitución, Retiro y Once se veían largas colas y mucha gente que intentaba movilizarse en colectivos repletos.

El paro afecta a los servicios del Mitre, Sarmiento, San Martín, Roca y Belgrano Sur.

Siguen funcionando el Belgrano Norte y el Urquiza.

Al paro no se sumó tampoco Metrovías, cuyos trabajadores sí cobraron el aguinaldo.

La Fraternidad argumentó que el conflicto se desencadenó porque “el Gobierno nacional no depositó el pago de los aguinaldos de los trabajadores de las líneas que están a su cargo y dependen de la UGOFE y la UGOMS”.

Y garantizaron que la protesta “no está relacionada con el conflicto por la instalación de cámaras en los trenes”.

Desde el Gobierno creen lo contrario y sostienen que esa fue la versión que difundieron la Unidad de Gestión Operativa Mitre Sarmiento (UGOMS) y el Ministerio del Interior.

La medida de fuerza consiste en la retención de tareas: el trabajador se presenta a trabajar, pero las formaciones no salen.

La protesta, según el gremio, será levantada en el momento en que los trabajadores puedan cobrar sus aguinaldos, con lo cual la medida podría extenderse durante todo el día si no tienen el dinero en los cajeros.