El secretario de Seguridad, Sergio Berni, rechazó hoy las acusaciones del intendente de Junín, Mario Meoni, quien se quejó de que el gobierno nacional no dio respuestas al pedido de envío de fuerzas de la Federal ante los hechos de inseguridad, y fiel a su estilo no pudo evitar un exabrupto al volver sobre el tema de la "sensación de seguridad".

"Acá nadie habla de una sensación de inseguridad. Este es un tema técnico, que tiene que ver con estudios de problemas de seguridad. Pero a la sociedad eso no le interesa. ¿A quién carajo le importa la sensación de inseguridad?", se preguntó Berni, en un razonamiento que no quedó del todo claro pero que deja en evidencia que los exabruptos ya son moneda corriente entre los funcionarios de Cristina Fernández.

Berni, un teniente coronel, intentó así defenderse de las críticas del intendente Meoni y de los hechos de violencia que se produjeron en esa ciudad, en la fecha de fútbol y con la muerte del joven jugador de rubgy en La Plata.

El viceministro de Seguridad también afirmó que Meoni tuvo "un acto de bajeza", al haber dicho que no le mandaron gendarmes por sus expresiones políticas.

"Esto que hizo el intendente demuestra su irresponsabilidad y su bajeza. Me hizo un llamado por fuera de todo contexto y rápidamente colgó. Lo único que hizo fue querer sacarse la responsabilidad", advirtió Berni.

El funcionario dijo que "es una especialidad del intendente hacer triquiñuelas y desviar la pelota al ángulo. La responsabilidad de la seguridad es función exclusiva de la provincia, pero son los intendentes los responsables de generar políticas activas para prevenir delitos como éste".

Con duras críticas a la gestión del radical, a quien consideró "poco comprometido", Berni sostuvo que Meoni solicita la Gendarmería de "manera liviana" y argumentó que lo hace "como una forma de deslindarse del problema".