En otro paso hacia un modelo cada vez más intervencionista, el inefable secretario Guillermo Moreno pretende, por orden de la presidenta Cristina Fernández, que las cadenas de supermercados adopten, como único medio de pago de parte de los consumidores, una tarjeta de débito del Banco Nación. La 'propuesta' fue lanzada en la habitual reunión de la carne, que los distintos representantes de la cadena de comercialización mantienen cada viernes con un funcionario que hace rato excedió el límite de sus funciones.

Moreno dijo que se trata de un pedido hecho por los mismos supermercadistas, que deben pagar comisiones altas (del 3% aproximadamente) a las tarjetas mas conocidas en el mercado como Visa o Mastercard.

En cambio, el Nación promete que cobrar comisiones de apenas el 1%.

La implementación de la tarjeta sería “inmediata”, y si bien el plástico no tiene nombre todavía, la medida “está cerrada”.