La presidenta Cristina Fernández hará todo lo posible por que el paro de este martes tenga poco impacto, y para ello no escatimará gastos y pondrá una flota de micros en puntos estratégicos con la intención de trasladar a la gente a sus lugares de trabajo. El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, dijo que el Gobierno va a "garantizar al ciudadano que quiere trabajar su medio de transporte" para este martes. "Quieren generar el caos y pretenden una reacción nuestra que no la van a tener", adelantó.

"Creo que va a haber muchos organizadores que van a generar caos, piquetes, cortes de ruta, quieren cortar los accesos a la ciudad de Buenos Aires... Me parece que ese no es el camino pero bueno, no se puede pelear con la irracionalidad de unos pocos", sostuvo el funcionario.

El problema para el gobierno de Fernández es que lo mismo que hará la CTA este martes lo vienen haciendo desde hace años las organizaciones piqueteras financiadas por la propia Casa Rosada, en especial cuando protestan contra el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.

Berni -a esta altura el hombre fuerte de la Seguridad- consideró que "muchos argentinos van a ir a sus trabajos, quieren trabajar, y la responsabilidad nuestra es asegurarle el medio de transporte", como también "la seguridad" en las estaciones de trenes y las terminales de colectivos.

El teniente coronel Berni -a quien le gusta descender en helicóptero en los lugares donde hay conflictos- aclaró que desde el gobierno, no van a "responder a las diferentes provocaciones" de los manifestantes.