En medio de idas y vueltas, el Gobierno argentino enviará un contingente de 50 marinos al puerto de Tema, en Ghana, para reforzar la tripulación de emergencia que está al bordo de la Fragata Libertad, que permanece rehén de fondos buitres que demandaron al país por la deuda en default. Los militares se sumarán a los 44 que ya permanecen en el lugar y así se podrá cubrir el servicio de guardias náuticas a una semana de que la autoridad portuaria decidiera mover la embarcación a otro amarradero.

El gobierno argentino aseguró que la fragata fue "objeto de agresiones por parte de las autoridades portuarias ghanesas" y se "realizaron aprestos de abordaje al buque en flagrante agresión de nuestra soberanía".

Puricelli dijo haber mantenido conversaciones telefónicas e intercambio de correos electrónicos con su par en Ghana, Joseph Henry Smith, al que le reclamó su intervención para que "cesen de inmediato las acciones de fuerza que estaban siendo llevadas a cabo en claro violación al derecho internacional".