El empresario argentino Carlos Molinari le presentó al gobierno uruguayo de José Mujica un proyecto mediante el cual un grupo inversor, integrado también por Symbiosis Uruguay, prevé una inversión inicial cercana a los u$s 190 millones para volver a poner en marcha las rutas que operaba Pluna.

Con Iberia como operador de la aerolínea, el grupo tiene como principal objetivo poner en funcionamiento, además de la tradicional ruta Montevideo y Buenos Aires, los vuelos que llegaban a Brasil, Bolivia, Paraguay, Miami y Madrid entre otros.

El plan a 10 años propuesto por el tandem Symbiosis–Molinari prevé la absorción de los 400 empleados y la negociación de la compra de otros 7 aviones.

Este grupo empresario le propone al gobierno uruguayo la conformación de una nueva aerolínea de bandera con la misión de reestablecer la conectividad, apostando al potencial logístico estratégico de Uruguay e implementando un plan de negocios que cumpla con incorporar a Uruguay a un esquema de transporte comercial tanto de pasajeros como de carga que potencie al país y a la región.