La tripulación de la Fragata Libertad, integrada por unos 200 marinos, incluidos varios del Uruguay, cumplió 11 días retenida en un puerto de Ghana a raíz de la acción iniciada por un fondo buitre por la deuda argentina, y luego de el gobierno de Cristina Fernández se negara a pagar una fianza de 20 millones de dólares para que se le permita salir a la embarcación.

Quienes está a bordo del buque pueden descender del mismo pero con horarios restringidos, contó el hermano del marinero Federico González, de 18 años y egresado del Liceo Naval Militar Almirante Storni, a quien por ser abanderado se le otorgó un premio para formar parte de la tripulación del buque escuela.

El revés judicial para la Argentina llegó luego de un pedido de bloqueo emitido por un tribunal de Nueva York, en un primer paso para un posible embargo de bienes del Estado argentino.

"Pueden bajar del buque, están en la costa y recorren los locales más cercanos para distraerse y no pensar tanto qué sucederá con ellos", explicó el familiar de uno de los marinos retenidos.

La acción que mantiene retenida a la Fragata Libertad fue iniciada por el fondo de inversión MNL en Nueva York y lograron ejecutarlo en Ghana.

El fallo los favoreció en un juicio contractual, donde el contrato fijaba reglas sobre la inmunidad soberana.

Así, lograron una sentencia donde hacen una interpretación de que la Argentina, dentro de ese contrato, renunció a la inmunidad soberana.

Los embargos son consecuencias del alto volumen de juicios que tiene la Argentina desde el default.