El Gobierno insistió en "no meterse" en lo ocurrido en la provincia de La Rioja, pero habló de "intereses ocultos" detrás de la eliminación de la enmienda constitucional que dejo al gobernador Angel Maza y a su vice Luis Beder Herrera sin posibilidades de presentarse a un nuevo mandato en octubre.

En el día después de la eliminación de la reelección ilimitada, el ministro del Interior, Aníbal Fernández dijo: "No tenemos que meternos, es una decisión que tomó la provincia".

Pero enseguida añadió: "El problema no es la reelección. Acá hay otros intereses non sanctos en contra del gobernador".

De todas maneras, el titular de la cartera política celebró que se haya puesto fin a la reelección ilimitada, algo que la Casa Rosada impulsa en todas las provincias en las que todavía existe tras la estrepitosa derrota del gobernador Carlos Rovira en Misiones. "Si se decidió que sea así [por la derogación de la norma], es la decisión del pueblo y hay que respetarla", afirmó.

Fernández insistió con que detrás de la eliminación de la reelección sin límite "hay un tufillo raro" y que el debate no fue "por la reelección en si misma sino por otros intereses".

El titular de la cartera política también fue interrogado sobre la posibilidad de que el ex menemista y actual embajador en México, Jorge Yoma se convierta en el nuevo candidato de la Casa Rosada para ser candidato a gobernador de la Rioja.

"El negro [como habitualmente apodan a Yoma] es una amigo de toda la vida. Y nadie duda de su trayectoria, de su trabajo legislativo ni de su trabajo en la embajada", elogió.

De todas maneras, mantuvo el hermetismo que la Casa de Gobierno decidió sostener alrededor del tema. "El Gobierno no ha decidido ni dicho nada todavía", afirmó.