El enganche de Boca Juan Román Riquelme se entrenó en Casa Amarilla y aseguró que a lo largo de la semana quedará definido si puede jugar frente a Rosario Central, por la segunda fecha del torneo Clausura.

El enlace realizó trabajos físicos, con la idea de afinar la puesta a punto y poder ser titular el próximo domingo, algo que aparece como bastante probable.

"Estoy feliz y entrenaré toda la semana lo mejor posible para ver si puedo jugar. La cancha de Boca siempre está llena y se mueve mucho, así que ojalá que pueda estar", precisó Riquelme, quien no viajó a Bolivia para jugar por la Copa Libertadores de América y prefirió quedarse para ponerse bien en la parte física.

"La gente me demuestra mucho cariño desde que llegué y siempre voy a estar muy agradecido. Quiero devolverle todo el cariño jugando de la mejor manera", agregó en declaraciones formuladas a la prensa, tras el entrenamiento.

Riquelme negó que en esta nueva etapa cambie demasiado su forma de moverse en la zona de gestación del campo de juego, y evitó referirse a la posibilidad de volver a la Selección argentina.

"Tengo la obligación de pensar en Boca de acá hasta junio y jugar lo mejor posible. Lo demás después se verá. Mi forma de jugar no creo que cambie de lo que siempre he hecho", indicó.

Por último, explicó que su permanencia en el Viejo Continente le permitió "disfrutar de jugar los torneos más importantes que hay" y añadió que la apuesta por jugar en Villarreal le salió "bien" porque arriesgó al llegar "a un club que no era muy conocido y que hoy lo es en Europa".