El fiscal general de Córdoba, Gustavo Vidal Lascano, renunció hoy a su cargo de manera "indeclinable", en medio de las críticas por la investigación del crimen de la
empresaria de Río Cuarto, Nora Dalmasso.

En una misiva que le mandó al gobernador de la provincia, José Manuel De la Sota, Lascano presentó su dimisión a su cargo, según confiaron fuentes judiciales a la agencia Noticias Argentinas.

La renuncia del ahora ex fiscal general de la provincia, se concretó en medio de la polémica por la investigación del crimen de Dalmasso, y la detención y posterior liberación del albañil Gastón Zárate, luego de que el juez Daniel Muñoz hiciera lugar al recurso de amparo presentado por su abogado defensor.

"Debo dar un paso al costado, a los efectos de que quien me suceda pueda disponer de las medidas que considere más convenientes para lograr un pronto esclarecimiento de este gravísimo delito", expresó Vidal Lascano en su renuncia, despejando así cualquier duda acerca del motivo de su alejamiento del cargo.

De acuerdo con lo que se informó, apenas De la Sota se enteró de esta presentación y del texto de la misma, dispuso las medidas para que se aceptara la decisión del fiscal sin ningún tipo de objeción y se comenzara a trabajar sobre el nombre del sustituto.

Mientras tanto, en el curso de los próximos días la fiscalía general continuará funcionando bajo el mando de los dos responsables adjuntos: Liliana Malvasio y Hugo Pitter.

Este último venía desempeñándose como el principal responsable del Ministerio Público en el seguimiento de la causa por Dalmasso.

Además de la derivación directa de la investigación, Vidal Lascano debía presentarse el próximo lunes en la Legislatura Unicameral de Córdoba para elevar un informe de situación sobre la actuación judicial que se siguió hasta el momento por este crímen.

La medida había sido confirmada en la tarde del sábado por el vicepresidente primero de la Cámara, Fran Fortuna, del bloque justicialista de Unión por Córdoba.

Vidal Lascano señalo además que por el caso Dalmasso conformó un equipo de tres fiscales para que trabajara "coordinadamente a los efectos de lograr el esclarecimiento del hecho".

Por eso enfatizó que "desde el primer instante en que comenzó la investigación, y dada la complejidad, brindó todo el apoyo material y humano a su alcance", lo que da cuenta de un último intento del, ahora saliente funcionario, por salvar la labor
desarrollada por él y sus fiscales en esta causa.

Por otra parte, y como producto de la renuncia de Vidal Lascano fuertes especulaciones giran en torno a la suerte de los otros tres fiscales del caso: Javier Di Santo, Fernando Moine y Marcelo Hidalgo.