Barack Obama renovó su llamado a demócratas y republicanos a "trabajar juntos" en la forma de resolver el problema de la deuda estadounidense, previo a una nueva reunión sobre el tema convocada en la Casa Blanca.

"Demócratas y republicanos tienen que trabajar juntos" para alcanzar un acuerdo que evite un cese de pagos de la deuda a comienzos de agosto, dijo Obama en su mensaje semanal por radio e internet.
"Quiere decir que debemos dejar de lado nuestras diferencias para hacer lo que el país necesita", afirmó.

"Todos van a tener que estar dispuestos a un acuerdo. De otra forma, nunca vamos a lograr algo", explicó.
Obama habló luego de convocar a los principales legisladores para una nueva reunión en la Casa Blanca, programada para esta tarde, alertando que se está acabando el tiempo para un acuerdo.

Obama confirmó que fracasaron las negociaciones de último minuto con los republicanos para evitar una cesación de pagos de la deuda. El presidente criticó a los republicanos por no aceptar un "pacto extraordinariamente justo".

El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, había anunciado poco antes que su partido se retiraba del diálogo con la Casa Blanca para buscar una salida al problema de la deuda, y que en adelante trabajaría con el Senado para alcanzar un acuerdo.

El anuncio alimentó las dudas sobre el destino de los esfuerzos para aumentar el límite de deuda de Estados Unidos de 14,3 billones de dólares antes del 2 de agosto, cuando el gobierno se quedará sin dinero para pagar sus cuentas.

Obama dijo ayer que el pueblo estadounidense está "harto" de las posturas políticas, y afirmó que estaba dispuesto "a firmar una extensión del límite de la deuda hasta 2013".