Un estudio universaitario sacó a la luz un preocupante datos para las actrices estrellas de Hollywood: si ganan el Oscar es muy probable que se separen.

"Hemos comprobado que el triunfo en el Oscar está asociado con un enorme riesgo de divorcio para las actrices, pero no para los actores."

Así se abre una investigación realizada por la Universidad de Toronto, según la cual el máximo triunfo de Hollywood para una mujer puede significar un espaldarazo en su carrera y al mismo tiempo provocar serios problemas matrimoniales.

El estudio, dado a conocer por la influyente publicación The Hollywood Reporter, determinó que el 63 por ciento de las estrellas que ganaron el Oscar a la mejor actriz entre 1936 y 2010 termina divorciada.

El porcentaje se reduce al 60 por ciento si se toma en cuenta a todas las nominadas en esa categoría.

La lista incluye, entre muchas otras, desde Katharine Hepburn, Joan Crawford y Bette Davis hasta Hilary Swank, Reese Witherspoon y Kate Winslet.

Un año atrás, la tendencia quedó ratificada en el caso de la última ganadora del premio, Sandra Bullock.

El relevamiento se extiende a un total de 265 nominadas a mejor actriz, de las cuales 159 terminaron divorciadas. Esa probabilidad crece en el caso de las más jóvenes.

El estudio, titulado "La maldición del Oscar: dinámica del status y diferencias de género en la supervivencia matrimonial" señala que la creciente tasa de divorcios se explica en buena medida por el factor de rechazo y la disconformidad de los esposos al éxito, la popularidad y el dinero que llegan con el premio más importante del año para Hollywood.

Al mismo tiempo, la obtención de un Oscar puede significar para una actriz una toma de conciencia más fuerte respecto del posible fracaso de su matrimonio.