El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, está fuera de peligro y "en una situación mucho más tranquila desde el punto de vista clínico", dijo hoy Alfredo Boccia, uno de los médicos de cabecera desde el hospital en la ciudad brasileña de Sao Paulo en donde se encuentra internado.

Los estudios a los que fue sometido este fin de semana revelaron "una gran disminución del tamaño del trombo que se le había formado en la vena cava superior, a partir del catéter que él tiene colocado" en la parte alta del pecho, agregó.

"Es altamente positivo que el coágulo se haya licuado de manera importante porque reduce los riesgos. Ahora él se encuentra en una situación mucho más tranquila desde el punto de vista clínico", remarcó Boccia.

El tratamiento médico continuará por lo menos hasta el miércoles porque "hay restos de trombo todavía y lo que se pretende es eliminar todo, de tal modo que ese catéter pueda seguir siendo útil y que no haya necesidad de cambiarlo".

Este lunes a la mañana se va a hacer otro control de imagen a ver si con eso es suficiente y "puede ser que el tratamiento termine ahí", aunque no se descarta que puedan surgir complicaciones.

"Si la cosa funciona bien y hay una buena respuesta en su estudio tomográfico, él pasaría ya a una sala general después del estudio, con lo cual habría que ajustar la dosis", debido a sus antecedentes de una trombosis en la pierna izquierda, aparecida en la década de 1990.

Desde entonces Lugo recibe dosis diarias de 60 miligramos de farina subcutánea y, pese a esa previsión que se hacía durante el tratamiento, desarrolló una trombosis a nivel de la punta del catéter, lo cual hace presumir a los médicos de un factor trombofílico que haya propiciado la crisis.

El presidente de Paraguay fue llevado de urgencia a Sao Paulo este sábado cuando aparecieron algunas inflamaciones que hicieron temer por un foco infeccioso, mientras viene sometiéndose a sesiones de quimioterapia debido a un linfoma descubierto en agosto.

Sin embargo, la situación fue controlada. "Se encuentra perfectamente bien, lúcido, sin problemas, sin dolores; la hinchazón que tenía en la cara disminuyó de tamaño. Estaba con hambre, porque después de estos estudios se quedó con un ayuno un poco prolongado", informó Boccia.

Siguió por televisión el desarrollo de las elecciones presidenciales de Brasil y se mantiene la opinión médica de que, por ahora, no hay necesidad de una intervención quirúrgica.

"Ha hecho una excelente evolución, por lo que se puede decir que está fuera de peligro y no habría necesidad de alterar el cronograma de tratamiento de la enfermedad de fondo, que reitero no tiene nada que ver con esta complicación que tuvo", concluyó el médico.

Más temprano había informado que existe un 80 por ciento de posibilidades que en el transcurso de la semana pueda volver a su país.