Las reuniones entre posibles candidatos presidenciales opositores al kirchnerismo se multiplicaron en las últimas horas y provocaron una fuerte reacción del oficialismo.

El jueves, el vicepresidente Julio Cobos y el diputado por el peronismo disidente Francisco de Narváez mantuvieron un encuentro en la localidad bonaerense de Tres Arroyos, ocasión en la que coincidieron en "acordar políticas públicas de largo plazo".

"Hay que acordar y no discutir tanto", dijo Cobos, y De Narváez señaló que "tenemos una vocación de construir en la Argentina".

El vicepresidente y el diputado nacional aprovecharon su visita a esa ciudad bonaerense para compartir un café y una charla durante media hora en un bar de Tres Arroyos.

Ambos dirigentes coincidieron en la necesidad de "acordar políticas públicas de largo plazo", se informó.

"Hay que acordar y no discutir tanto. Así se construyó este país, con diferentes razas, con inmigrantes de distintos lugares y sin embargo ellos supieron construir metas colectivas", puntualizó Cobos.

"Con Francisco nos conocemos desde antes, inclusive desde antes que yo fuera gobernador (de Mendoza)", prosiguió Cobos.

Por su parte, el peronista disidente dijo que con el mendocino tienen "preocupaciones comunes, la mirada de largo plazo, devolverle certezas a los ciudadanos, hablar de la educación, de la salud, de la vivienda" y calificó de "exitosa" la gestión "como gobernador de Mendoza".

La reunión de ayer llegó un día después de otro encuentro (el martes por la noche) en el que también participó De Narváez, esta vez con los referentes del PJ disidente (incluido Mauricio Macri), pero con el condimento especial que implicó que el anfitrión era el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto, enemigo público número uno del gobierno de Cristina Kirchner.

Además de ser el anfitrión de esta reunión, Magnetto también encabezó el miércoles una reunión de importantes empresarios que criticaron la falta de seguridad jurídica en la gestión K.

El diario Ámbito Financiero reveló que el martes por la noche Magnetto recibió en su casa de Arroyo y Cerrito a Eduardo Duhalde, Carlos Reuteman, Francisco De Narváez, Felipe Solá y a Macri. Pasaron varias horas hasta que quebraron sus diferencias y se comprometieron a pacificar las pujas por las candidaturas para lograr un armado común que dé pelea en la campaña presidencial.

Desde el kirchnerismo salieron a pegarles. Para el legislador ultra K Carlos Kunkel, la reunión "está sincerando las cuestiones políticas". Para el diputado Agustín Rossi, "el PJ disidente decidió ser la pata peronista de las corporaciones".

"Si el señor Magnetto decide ser candidato a presidente y lo pone a Mariano Grondona como jefe de Gabinete y a Martínez de Hoz como ministro de Economía, hay que respetarlo", dijo Kunkel en declaraciones radiales. "En 7 días, foto con Biolcati y cena con Magnetto: el PJ disidente decidió ser la pata peronista de las corporaciones", twiteó el santafesino.