De la Redacción de Asteriscos.tv

Toda la historia de la selección uruguaya y la ilusión de años sin grandes logros saltará este martes a la cancha para jugar con el fervor que siempre lo ha hecho un lugar en la final de la Copa del Mundo después de 60 años.

Golpeado, con cinco cambios obligados, con solo 17 jugadores de campo para optar por situaciones claves, con esa ralidad y ala vez con la moral muy alta, los "Charrúas" pura garra y fuerza son a la vez la "cenicienta" de estas finales del Mundial 2010.

Enfrente, en el partido que se disputará este martes a partir de las 15:30 hora de Argentina en Ciudad del Cabo, los uruguayos se medirán con Holanda que también regresa a instancia finales por viejos laureles con un equipo renovado y de figuras con hambre de gloria.

Más aún, esa motivación toma forma, después de haber eliminado en los cuartos de final a Brasil, el "gran candidato" de los mundiales.

Con su dramática victoria en la tanda de penales contra Ghana en cuartos de final, Uruguay alcanzó la penúltima ronda de una Copa Mundial por primera vez en 40 años.

En México 1970, la Celeste cayó por 1-3 ante Brasil, posterior campeón, y finalizó la competición en cuarta posición.

Para Holanda, que rompió la lógica imponiéndose a la pentacampeona mundial, ésta será la cuarta semifinal después de las de 1974, 1978 y 1998.

Precisamente en el camino a la semifinal de 1974, se produjo el hasta ahora único duelo entre ambos conjuntos en una Copa Mundial de la FIFA.

En aquel entonces, el cuadro de Johan Cruyff saldó el choque de la fase de grupos por 2-0 gracias a dos goles de Johnny Rep. Uno de los miembros de aquella selección uruguaya era el lateral Pablo Forlán, padre del actual artillero celeste, Diego Forlán.

Tanto el técnico uruguayo Óscar Tabárez, como el holandés Bert van Marwijk, tendrán que recomponer sus equipos de cara a la semifinal.

El el equipo sudamericano cuenta con las bajas de los sancionados Jorge Fucile y Luis Suárez.

Además, peligra seriamente la presencia del capitán Diego Lugano, debido a una contusión y a una distensión de ligamentos en la rodilla derecha.

A ellos hay que sumarles la ausencia del joven y prometedor Nicolás Lodeiro, que dijo adiós al campeonato de forma prematura por culpa de una fractura en un hueso del pie.

Por su parte, Van Marwijk buscará la mejor manera de remplazar a los jugadores Gregory van der Wiel y Nigel de Jong.

Todo está listo para un gran partido con una Holanda que quiere la final porque "la tercera es la vencida" y Uruguay llevar la sangre oriental hasta el centro del mundo 80 años después del primer título de 1930.