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¿Qué hizo bien y qué hizo mal la Selección en Sudáfrica?
Irse del Mundial con una goleada frente a Alemania fue un golpe difícil de asimilar en el corto plazo. Hubo fallas en el funcionamiento del equipo, pero dejó un saldo positivo en otros aspectos, como la unión del grupo
4 de julio de 2010
Por Diego Provenzano, enviado especial de Asteriscos.Tv a Sudáfrica
La Selección nacional llegó al Mundial con la ambición de volver a ganar la Copa tras 24 años de frustraciones, pero el sueño albiceleste quedó trunco en Ciudad del Cabo, donde Alemania demolió 4-0 al conjunto de Diego Maradona.
Un puñado de horas no alcanzan para cicatrizar las heridas que provocó semejante tropezón, sobre todo en los hinchas, que acompañaron en gran número al conjunto argentino en los cinco partidos que jugó aquí.
De todos modos, cuando la decepción logre dejarle paso a la reflexión, se podrá trazar un balance más equilibrado sobre la tarea que cumplió el equipo nacional en Sudáfrica y el trabajo del entrenador Die Maradona.
Porque así como el funcionamiento de la Selección dejó en evidencia grietas que Alemania supo aprovechar este sábado para destruir el sueño mundialista de 40 millones de hinchas argentinos, la participación del equipo en este torneo también dejó un saldo positivo, en otros aspectos, como por ejemplo la convivencia y la unión del grupo en la concentración de Pretoria.
¿Qué hizo bien y qué hizo mal Argentina en el Mundial?
Aprobado:
- Después de mucho tiempo se consolidó un equipo en la Selección. Con buena unión grupal, los reproches no fueron entre los jugadores.
- El cambio a un esquema atrevido que por tradición y plantel se condice con la realidad del fútbol argentino. En la mayor parte del torneo, los futbolistas entendieron el mensaje.
- Fue una consecuencia inevitable del punto anterior pero el poder ofensivo se notó en los cuatro partidos previos a la eliminación. La calidad de sus individualidades fueron necesarias, pero más allá del rival de turno, hay que generar tantas situaciones.
- El entrenamiento dio sus resultados. Se le reclamaba trabajo y esta Selección lo tuvo, se notó en las pelotas paradas y en el funcionamiento conjunto en momentos complicados.
- La recuperación de Lionel Messi. Maradona lo mimó y le dio libertad, si bien no pudo hacer goles, Leo repuntó sus actuaciones con la Selección que habían generado tantos cuestionamientos.
- También a partir del buen manejo del grupo del “Diez”, Romero se convirtió en un arquero que brindó seguridad y que permite ilusionarse con una continuidad de varios años.
Desaprobado:
- La mayoría de estos apuntes tendrán su base en el partido contra Alemania, pero una de las fallas en general fue la defensa. Jugaron todos -menos Garcé- y nunca mostró la seguridad esperada.
- Desde la parte técnica hubo varios puntos bajos. Di María y Maxi Rodríguez fueron los abanderados de las desatenciones de manejo, pero cuando tenía que haber tranquilidad hubo nerviosismo.
- Otra “falla” del equipo fue la falta de contundencia y definición. Es destacable la generación de opciones, pero el no haberlas concretado fue contraproducente.
- En lo que corresponde al cuerpo técnico, Maradona terminó mostrando su falta de tacto en el partido donde no podía demostrarlo. No cambió a tiempo y tampoco le indicó el rumbo correcto a sus jugadores.
- La autocrítica tampoco estuvo. La realidad mostró que no se jugó bien, que nunca en los últimos 90 minutos del torneo se pudo encontrar el camino. Fue mucho más que ese primer gol al que se atribuyó el posterior desempeño.
La Selección nacional llegó al Mundial con la ambición de volver a ganar la Copa tras 24 años de frustraciones, pero el sueño albiceleste quedó trunco en Ciudad del Cabo, donde Alemania demolió 4-0 al conjunto de Diego Maradona.
Un puñado de horas no alcanzan para cicatrizar las heridas que provocó semejante tropezón, sobre todo en los hinchas, que acompañaron en gran número al conjunto argentino en los cinco partidos que jugó aquí.
De todos modos, cuando la decepción logre dejarle paso a la reflexión, se podrá trazar un balance más equilibrado sobre la tarea que cumplió el equipo nacional en Sudáfrica y el trabajo del entrenador Die Maradona.
Porque así como el funcionamiento de la Selección dejó en evidencia grietas que Alemania supo aprovechar este sábado para destruir el sueño mundialista de 40 millones de hinchas argentinos, la participación del equipo en este torneo también dejó un saldo positivo, en otros aspectos, como por ejemplo la convivencia y la unión del grupo en la concentración de Pretoria.
¿Qué hizo bien y qué hizo mal Argentina en el Mundial?
Aprobado:
- Después de mucho tiempo se consolidó un equipo en la Selección. Con buena unión grupal, los reproches no fueron entre los jugadores.
- El cambio a un esquema atrevido que por tradición y plantel se condice con la realidad del fútbol argentino. En la mayor parte del torneo, los futbolistas entendieron el mensaje.
- Fue una consecuencia inevitable del punto anterior pero el poder ofensivo se notó en los cuatro partidos previos a la eliminación. La calidad de sus individualidades fueron necesarias, pero más allá del rival de turno, hay que generar tantas situaciones.
- El entrenamiento dio sus resultados. Se le reclamaba trabajo y esta Selección lo tuvo, se notó en las pelotas paradas y en el funcionamiento conjunto en momentos complicados.
- La recuperación de Lionel Messi. Maradona lo mimó y le dio libertad, si bien no pudo hacer goles, Leo repuntó sus actuaciones con la Selección que habían generado tantos cuestionamientos.
- También a partir del buen manejo del grupo del “Diez”, Romero se convirtió en un arquero que brindó seguridad y que permite ilusionarse con una continuidad de varios años.
Desaprobado:
- La mayoría de estos apuntes tendrán su base en el partido contra Alemania, pero una de las fallas en general fue la defensa. Jugaron todos -menos Garcé- y nunca mostró la seguridad esperada.
- Desde la parte técnica hubo varios puntos bajos. Di María y Maxi Rodríguez fueron los abanderados de las desatenciones de manejo, pero cuando tenía que haber tranquilidad hubo nerviosismo.
- Otra “falla” del equipo fue la falta de contundencia y definición. Es destacable la generación de opciones, pero el no haberlas concretado fue contraproducente.
- En lo que corresponde al cuerpo técnico, Maradona terminó mostrando su falta de tacto en el partido donde no podía demostrarlo. No cambió a tiempo y tampoco le indicó el rumbo correcto a sus jugadores.
- La autocrítica tampoco estuvo. La realidad mostró que no se jugó bien, que nunca en los últimos 90 minutos del torneo se pudo encontrar el camino. Fue mucho más que ese primer gol al que se atribuyó el posterior desempeño.