A priori se enfrentaban dos equipos de técnica similar, con un juego parecido desde la filosofía de jugar ordenado y progresar con el ataque una vez que se tiene la posesión del balón.

Así salieron a jugar Estados Unidos y Eslovenia, pero fueron los europeos quienes se hicieron dueños del juego con el correr de los minutos y tuvieron las chances más claras de gol.

A los 13 minutos, el volante Valter Birsa tomó la pelota cerca del área y sacó un potente zurdazo que se clavó en el palo izquierdo del atónito Tim Howard, que se quedó parado, sorprendido por el remate. Así, los eslovenos pasaban a ganar el partido y a dominar ante la desesperación norteamericana.

Bradley. Así, perdieron frescura de tres cuarto de cancha en adelante, aunque con tesón y empuje llevaron cierto peligro al arco esloveno.

Pero Eslovenia encontró otra chance clara a los 41. Un puñal a las espaldas de los defensores norteamericanos encontró al delantero, Zlatan Ljubijankic, quien paró la pelota, enfrentó a Howard y acomodó el balón rasante al palo derecho. Gran definición para un 2-0 que parecía demasiado, pero que premiaba el orden y la eficacia eslovena.

En el inicio del complemento, Estados Unidos reaccionó rápido. Donovan, de un pobre primer tiempo, ingresó en total libertad al área, costeando la línea de fondo.

Ningún defensor lo tapó y la estrella norteamericana sacó un tremendo remate que se metió contra el travesaño, ante un arquero desprotegido, sin reacción y que se dio vuelta ante el derechazo.

A partir de ese momento, Eslovenia se cerró bien atrás y dejó sus fichas puestas en la contra. A los 25 Estados Unidos tuvo el segundo tras un fuerte remate que encontró bien parado al arquero

Pero de tanto ir, Estados Unidos encontró el empate. Fue a nueve minutos del final, por parte del resistido Michael Bradley, el hijo del entrenador, quien se encontró con la pelota dentro del área y no dudó en romperle el arco a Handanovic. Un merecido premio al esfuerzo norteamericano, que siempre intentó ir al frente.

Sobre el final del partido, Maurice Adu capturó de cabeza un centro de Donovan y ponía el 3-2, pero el árbitro del partido, el maliense Koman Koulibaly, anuló la jugada previa por una supuesta infracción que no existió.

El triunfo hubiera sido merecido, para un equipo que nunca bajó los brazos y peleó hasta el final por la victoria. En tanto, Eslovenia se fue enamorando de defender un triunfo corto, y ese amor le terminó saliendo demasiado caro.

De todas formas, los eslovenos continúan liderando el Grupo C y parece que por ahora, jugar así los convence.

Formaciones:
Estados Unidos: Howard; Cherundolo, DeMerit, Onyewu, Bocanegra; Bradley, Torres; Dempsey, Donovan; Altidore y Findley. DT: Bob Bradley

Eslovenia: Handanovic; Brecko, Suler, Cesar, Jokic; Birsa, Radoslavjevic, Korem, Kirm; Novakovic, Ljubijankic. DT: M. Kek

Gol en el primer tiempo: 12m Birsa (Esl.), 41m Ljubijankic (Esl.)

Estadio: Ellis Park (Johannesburgo). Árbitro: Koman Koulibaly (Malí).