Por Adrián Taccone, de la redacción de Asteriscos.Tv

Completados los 16 partidos iniciales de la primera fecha de la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, la pregunta que surge sola es "¿dónde quedó el fútbol?", y no es que uno sea demasiado pretensioso, pero lo cierto es que los equipos se cuidaron mucho, casi hasta el hartazgo y entregaron nada, en vez de poco.

El fútbol, si en cuanto a efectividad se habla, estuvo en Alemania, que goleó a Australia 4-0 y como siempre impuso su historia desde el arranque, para demostrar que más allá de todo lo que se diga y las lesiones que sufrió, no hay que bajarlo del lote de candidatos.

Confirmaciones hubo en las actuaciones de Argentina, muy buen triunfo ante Nigeria por 1-0, lo que produjo Holanda en la victoria 2-0 sobre Dinamarca y cuentagotas de Brasil, que si bien le ganó exiguamente a Corea del Norte por 2-1, nunca corrió peligro su victoria.

Por ahí anda la gran sorpresa de esta primera fecha, como fue la derrota de la gran favorita España a manos de una estructurada Suiza por 1-0, que pone en serios riesgos a la "furia", sobre todo si se toma en cuenta que Chile -de la mano de Marcelo Bielsa- comenzó con el pie derecho, también con un ajustado 1-0 ante la "cenicienta" Honduras.

Tampoco estuvieron bien Italia, igualó 1-1 con Paraguay, Inglaterra, que empató con Estados Unidos 1-1 con un "blooper" de su arquero Roberto Green, y Portugal, que con Cristiano Ronaldo no pasó del cero con Costa de Marfil.

También está visto que los errores se pagan caro, y de eso pueden dar cuenta el arquero Green de Inglaterra, el portero Justo Villar de Paraguay y el argelino Chouchiz, quienes ante fallas propias permitieron goles de sus rivales.

Luego de los nervios del debut, de la presentación de todos los equipos, de los resultados a favor y en contra, la segunda fecha nos debería entregar espectáculos más incisivos, dado que los equipo deberán ir a buscar la clasificación a octavos de final, y otros tratar de ganar para no quedar eliminados y tener chances en el útlimo cotejo de grupo.

Entre las individualidades lo mejor estuvo en los pies de Lionel Messi, ya que el argentino está llamado a ser la figura excluyente de esta competencia, dado que llegó con el título del "mejor jugador del mundo". Los demás están varios escalones abajo.

El juego comenzó, las cartas están echadas y solo queda sentarse y rogar que el fútbol tan deseado, aparezca.