Fernando Solanas presentó un proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura alternativo al que acordó el resto del arco opositor.

Los mayores contrastes se dan por el rechazo de Proyecto Sur y sus aliados a la reincorporación del presidente de la Corte Suprema -postura que avalan la UCR, la Coalición Cívica, el PJ disidente, el PRO, el socialismo y el GEN- y a la instauración de un sistema de auditorías para evaluar el desempeño de los jueces en funciones.

Sectores del peronismo anti K cuestionaron ambas posturas por entender que "son sospechosamente similares a las que impulsa el oficialismo". Con todo, el titular de la Comisión de Justicia, el radical Ricardo Gil Lavedra, anticipó que insistirá en negociar un acercamiento para asegurar los votos.

Otra innovación del proyecto presentado por Liliana Parada y Alcira Argumedo, del bloque de Solanas, es que no será obligatorio ser abogado para representar a los académicos y que los legisladores sólo podrán designar delegados, elegidos por todo el Congreso con el 3/4 de los votos.