Otra vez la feroz pelea entre el oficialismo y la oposición vuelve a poner en el tapete cuánto importan a los funcionarios las políticas. Esta vez, la disupta vuelve a ser la ley del cheque, o en todo caso, quien sale "ganando" esta disputa.

Esta tarde, el vicepresidente, Julio Cobos, volvió a girar a la Cámara baja el proyecto de reforma a la coparticipación de la ley del cheque que fue aprobado en la madrugada del jueves último en el Senado.

Esta mañana, tal como estaba previsto y después de la orden que recibió ayer de Cristina Kirchner, el presidente de la Cámara de Diputados, el kirchnerista Eduardo Fellner, había devuelto la media sanción al Senado.

"Excede por completo la posibilidad constitucional de esa Presidencia devolver la sanción oportunamente comunicada por este cuerpo como expediente 10-S-10, a título personal y por las consideraciones que advierte", sostuvo Cobos.

El lider de Proyecto Sur Pino Solanas afirmó que "Fellner no se le puede negar a la Cámara de Diputados la potestad de discutir estas cosas. El debate le corresponde al cuerpo".

El debate de fondo pasa por la mayoría con la que la iniciativa se aprobó la semana pasada en la Cámara alta. Para la oposición, la media sanción por mayoría simple es válida. Argumentan que no se requería una mayoría agravada porque el impuesto no impone una asignación específica, sino que, por el contrario, devuelve a las provincias para su coparticipación la totalidad de lo recaudado por el tributo.