El sueño de Jose María López de llegar a la Fórmula 1 volvió a quedar al borde de la decepción y en manos de Bernie Eccelstone.

A esta situación se llegó tras el reconocimiento del equipo estadounidense US F 1 de su imposibilidad de arrancar el Campeonato Mundial el 14 de marzo en Bahrein y a la alta chance de no correr en toda la temporada.

De todos modos la historia podría tener un final feliz en caso que Ecclestone, hombre fuerte de la F 1, dé su OK para ubicar a Pechito en Campos o en Stefan GP, dos de los nuevos equipos que pretenden ingresar este año a la categoría.

Para eso tuvo este miércoles en Londres distintas reuniones con allegados al piloto argentino. Estas se repetirán hoy en busca de definiciones que urgen ante la proximidad del inicio del campeonato.

No sorprendió el anuncio de US F 1 de la imposibilidad de terminar su auto. Algo se intuía con la poca y escueta información que prácticamente no hablaba del avance en la construcción de las máquinas ante la inminencia de la prueba de resistencia (crash test) que finalmente no se hizo.

Esta demora la comprobaron Felipe McGough y Victor Rosso, dos piezas clave en las gestiones junto con el padre de López, al llegar a Charlotte, la sede estadounidense del equipo y reunirse con el director deportivo Peter Windsor.

Por eso viajaron a Inglaterra al tiempo que Windsor empezaba a reconocer lo que hasta horas antes negaba: la imposibilidad de terminar a tiempo el auto. Según versiones el diálogo entre Windsor y la gente de López no terminó de la mejor manera. El vocero oficial del cordobés negó esas versiones.

Ya en Inglaterra, el grupo de López tuvo distintas reuniones. Una de las más importantes fue con integrantes de la Fórmula One Managment (FOM), la empresa de Bernie Ecclestone; Barrie Mullins, representante de Chad Hurley, cofundador del sitio YouTube y principal inversor económico de US F 1; y José María Carabantes, socio de Adrián Campos en la escudería Campos.

También hubo un encuentro con Colin Kolles, director deportivo y delfin de Ecclestone, para ubicar a López en ese equipo o en Stefan.

Mientras, este jueves López llegaría a Inglaterra luego de permanecer en Austría y allí esperará las novedades.

Una de las alternativas más barajadas sería la fusión de Campos y US F 1 gracias al aporte financiero que Hurley haría para saldar la deuda que posibilitaría la entrega de los chasis Dallara al equipo español y completaría el pago del los motores Cosworth.

Un aporte que rondaría los 4 millones de euros. De concretarse esta unión, López podría hacer valer su contrato con el US F 1 con avales y garantías más el anticipo del presupuesto entregado como prioridad por un lugar en el equipo y acompañar al brasileño Bruno Senna, sobrino del recordado Ayrton Senna .

"Tengo un pacto de confidencialidad y no puedo hablar", le contestó sobre el tema Adrian Campos a Clarín. Sólo agregó que en los próximos días habrá definiciones importantes

Menos firme asoma la chance que López se integre al Stefan, el equipo del millonario Zoran Stefanovic que adquirió la infraestructura de Toyota y que cuenta con el visto bueno de Ecclestone.

Ya tiene confirmado al japonés Kazuki Nakajima, que corrió los dos últimos años en Williams y fue propuesto por Toyota. La otra butaca la pretende, con 6 millones de dólares en el maletín, el indío Karun Chandhok que, como López, todavía no corrió un Gran Premio pero tiene el aval que su padre es amigo de Ecclestone.

A favor juega que Stefanovic es conocido del constructor argentino Enrique Scalabroni.

Con circunstancia distintas a las esperadas se avecinan horas decisivas para José María López. para saber si vuelve a caerse su ilusión en la F 1 o si tiene la fortuna que ésta vez la mano de Ecclestone lo empuje para hacerlo entrar.