Los principales referentes del oficialismo en el Congreso volvieron a cargar contra Julio Cobos luego de la aparición de este último en una reunión de dirigentes de la Unión Cívica Radical en San Nicolás, y coincidieron en reclamar la renuncia del vicepresidente.

"El señor Cobos debería asumir con más plenitud la oposición y renunciar a su cargo", lanzó el titular del bloque de senadores del Frente para la Victoria, Miguel Ángel Pichetto, quien señaló que la dimisión del vicepresidente "correspondería en un país serio".

Pichetto arremetió fuertemente contra el vicepresidente y lo calificó de tener "actitudes desestabilizadoras" por participar de la reunión en San Nicolás.

"Estoy preocupado, porque vi al vicepresidente en una reunión de un partido de la oposición que lo instaba a que vote en contra del gobierno. Eso es una actitud desestabilizadora, por lo menos", aseguró el senador rionegrino, y agregó: "Estamos viviendo tiempos absurdos de cuasi golpismo o de actitud de desestabilizador explícita de cara a la sociedad. Es un regreso de los brujos, casi un retorno al 55".

El senador kirchnerista culpó al vicepresidente de "vulnerar el rol institucional que contempla la Constitución" y consideró al encuentro radical como "una señal muy grave para las instituciones argentinas", y reclamó: "El señor Cobos debería asumir con más plenitud la oposición y renunciar a su cargo. Eso correspondería en un país serio".

"El vicepresidente representa al Poder Ejecutivo en la Cámara de Senadores, tiene que desempatar y lo debe hacer a favor del Ejecutivo", exigió Pichetto.

"Hasta ahora no había cometido un error tan grosero. Alentarlo a votar en contra del gobierno significa alterar el rol institucional del vicepresidente. Es una actitud de desestabilización", agregó.

"Ellos [los radicales] que hablan tanto de la institucionalidad y de preservación de las formas, están perdiendo hasta las formas", opinó el senador oficialista para luego lanzar una chicana contra Cobos, al decir que no renuncia a la Vicepresidencia porque "no está seguro de su propio partido y de que su partido lo vaya a llevar de candidato".

También se sumó a las críticas contra cobos el jefe del bloque kirchnerista de la Cámara de Diputados, Agustín Rossi, quien coincidió con su par del Senado en reclamar la dimisión del vicepresidente, a quien acusó de "participar de las estrategias opositoras" para obstaculizar al Gobierno.

"Es una burla a las instituciones que mientras sigue siendo el vicepresidente de la Nación, Cobos participe de un encuentro de legisladores del principal partido de la oposición, la Unión Cívica Radical, donde se diagrama la estrategia parlamentaria contra el gobierno que él integra", arremetió el diputado santafecino.

Rossi aseguró que "[si Cobos] quiere ser el jefe de la oposición tiene que renunciar", ya que "no puede ser vicepresidente de un gobierno y participar de las estrategias opositoras que se pergeñan para obstaculizarlo".

"Es inadmisible y contrario a todo comportamiento ético que el vicepresidente vaya a una reunión política a instar a los legisladores de la oposición a votar en contra de las políticas del gobierno al que pertenece", insistió el diputado kirchnerista y agregó: "Es hora de que Cobos defina su situación".

El legislador santafecino también acusó al radicalismo de especular con la continuidad de Cobos en el cargo para forzar desempates favorables a la oposición. "En esa misma reunión se especuló que la permanencia de Cobos en la vicepresidencia se justificaría ante la paridad de fuerzas en el Senado, por lo que utilizaría su cargo para desempatar a favor de la oposición, con lo cual la contradicción ética e institucional es más grave aún", afirmó.

"Cobos representa al Poder Ejecutivo en el Senado de la Nación y se quedaría en su cargo solamente a los efectos de votar en contra de ese Poder Ejecutivo al que representa", sintetizó Rossi.

"Hace tiempo ha dejado de cumplir una parte de su función, que es representar al Poder Ejecutivo ante el Congreso. Está actuando sin recato y sin prudencia, desesperado por su futuro político y sin interesarse por la suerte de los argentinos", concluyó el legislador.