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Una mujer se arrojó sobre el Papa y casi lo hace caer
Fue en la misa Nochebuena en la impactante Basílica de San Pedro. Benedicto XVI perdió el equilibrio, aunque se recuperó y luego ofició ante una multitud
25 de diciembre de 2009
El papa Benedicto XVI sufrió esta noche un incidente cuando ingresaba a la Basílica de San Pedro. Una mujer, cuya identidad se desconoce, saltó una valla e intentó arrojarse sobre el máximo pontífice, lo que le hizo perder el equilibrio. Pero se recuperó rápidamente y terminó oficiando normalmente la misa de Gallo.
El episodio ocurrió cuando Benedicto XVI caminaba por el pasillo principal para dar inicio a la misa de Nochebuena. El padre Ciro Benedettini dijo que el pontífice rápidamente se puso de pie y resultó ileso. Benedicto XVI, de 82 años, reanudó tranquilamente sus pasos rumbo al altar principal de la basílica y comenzó la misa.
Benedettini explicó que la mujer que empujó al Papa parecía padecer una inestabilidad mental y fue detenida por la policía del Vaticano. Informó que también derribó al cardenal Roger Etchegaray, el cual fue trasladado al hospital para someterse a una revisión.
Tras el angustiante episodio, Benedicto XVI llevó adelante la misa que, por primera vez, fue adelantada dos horas. El vocero papal, Federico Lombardi, dijo que la decisión de cambiar la hora se tomó hace dos meses y medio para "reducir la fatiga (del Papa) en una época de muchas ceremonias y compromisos". No obstante, aclaró que "no hay motivo para preocuparse de la salud" del pontífice de 82 años.
Ratzinger regresará al recinto vaticano mañana al mediodía, para leer el tradicional Mensaje de Navidad e impartir la bendición "Urbi et Orbi" (a la ciudad de Roma y a todo el mundo), que será transmitido por un centenar de televisoras de más de medio centenar de países.
Hoy, antes de la Misa del Gallo, el Papa encendió a media tarde el Cirio de la Paz en la ventana de su departamento, que da a la plaza de San Pedro. Al hacerlo, no pronunció ninguna frase y se limitó a rezar unos segundos por la paz en el mundo.
En la Plaza de San Pedro, en tanto, peregrinos y turistas siguieron la misa a pesar de la lluvia sobre pantallas gigantes de video. Allí se instaló un enorme pesebre que mide unos 25 metros de ancho y abarca unos 300 metros cuadrados. El pesebre vaticano consiste sobre todo en figuras que el artista Vincent Palloti realizó en el siglo XIX para la iglesia barroca Sant'Andrea della Valle, ubicada en el centro histórico de Roma. A ellas se le sumaron otras figuras, como dos ángeles provenientes de México.
En el centro hay un árbol de Navidad de 30 metros traído desde los bosques de las Ardenas en Bélgica. A su alrededor, chicos con gorros blanquirrojos de Santa Claus entonaban himnos conmemorativos bajo una llovizna persistente.
El episodio ocurrió cuando Benedicto XVI caminaba por el pasillo principal para dar inicio a la misa de Nochebuena. El padre Ciro Benedettini dijo que el pontífice rápidamente se puso de pie y resultó ileso. Benedicto XVI, de 82 años, reanudó tranquilamente sus pasos rumbo al altar principal de la basílica y comenzó la misa.
Benedettini explicó que la mujer que empujó al Papa parecía padecer una inestabilidad mental y fue detenida por la policía del Vaticano. Informó que también derribó al cardenal Roger Etchegaray, el cual fue trasladado al hospital para someterse a una revisión.
Tras el angustiante episodio, Benedicto XVI llevó adelante la misa que, por primera vez, fue adelantada dos horas. El vocero papal, Federico Lombardi, dijo que la decisión de cambiar la hora se tomó hace dos meses y medio para "reducir la fatiga (del Papa) en una época de muchas ceremonias y compromisos". No obstante, aclaró que "no hay motivo para preocuparse de la salud" del pontífice de 82 años.
Ratzinger regresará al recinto vaticano mañana al mediodía, para leer el tradicional Mensaje de Navidad e impartir la bendición "Urbi et Orbi" (a la ciudad de Roma y a todo el mundo), que será transmitido por un centenar de televisoras de más de medio centenar de países.
Hoy, antes de la Misa del Gallo, el Papa encendió a media tarde el Cirio de la Paz en la ventana de su departamento, que da a la plaza de San Pedro. Al hacerlo, no pronunció ninguna frase y se limitó a rezar unos segundos por la paz en el mundo.
En la Plaza de San Pedro, en tanto, peregrinos y turistas siguieron la misa a pesar de la lluvia sobre pantallas gigantes de video. Allí se instaló un enorme pesebre que mide unos 25 metros de ancho y abarca unos 300 metros cuadrados. El pesebre vaticano consiste sobre todo en figuras que el artista Vincent Palloti realizó en el siglo XIX para la iglesia barroca Sant'Andrea della Valle, ubicada en el centro histórico de Roma. A ellas se le sumaron otras figuras, como dos ángeles provenientes de México.
En el centro hay un árbol de Navidad de 30 metros traído desde los bosques de las Ardenas en Bélgica. A su alrededor, chicos con gorros blanquirrojos de Santa Claus entonaban himnos conmemorativos bajo una llovizna persistente.