La imprevista crecida del río Atuel elevó el nivel hasta casi tres metros y arrasó con automóviles que se encontraban en distintos camping e inundó cabañas, arrancó seis zeppelines de gas, a unos 35 kilómetros al sur de la villa cabecera del departamento San Rafael.

Mientras tanto, en la villa cabecera de San Rafael, situada a 232 kilómetros al sur de la capital mendocina, el temporal derribó árboles que al caer dañaron viviendas, vehículos y provocaron cortes de cables de energía, resultando la zona de Pueblo Diamante la más afectada de la ciudad sanrafaelina.

El fenómeno sorprendió a turistas y habitantes de la zona de Valle Grande y también a los distritos Rama Caída, Las Paredes y Salto de Las Rosas y la villa cabecera de San Rafael, cuando al promediar la tarde comenzó a llover intensamente con ráfagas de viento de más de cien kilómetros.

En el camping "Escorial" de Rama Caída, la imprevista correntada de agua del río Atuel arrastró una casilla rodante donde se encontraba un matrimonio con sus nietos.

El hombre se encuentra desaparecido, mientras que su esposa y una nieta de diez años murieron. Otros hermanitos fueron rescatados.

Por su parte el vicegobernador Cristian Racconto, quien se encuentra en la zona del desastre, confirmó la muerte de un menor de doce años al caer un desprendimiento de roca sobre una traffic, en cuyo interior se encontraba durmiendo a la altura de la presa embalse Valle Grande.

Los familiares del nene habían descendido del vehículo a la espera de poder regresar a la villa cabecera de San Rafael, reseñó Racconto.

En tanto más de 450 personas evacuadas en el distrito agrícola de Las Rosas se encuentran alojados en escuelas e iglesias de la zona.