Durante un discurso en una conferencia comercial de Soccerex, también indicó que la FIFA podría reconsiderar la organización de un certamen clasificatorio para futuras copas del mundo para eliminar así el actual sistema de repechajes.

"El control de partidos está ahora en la agenda. Por ejemplo, ¿cómo podemos evitar la situación de la mano que tuvimos en el partido entre Francia e Irlanda?", planteó el máximo directivo de la entidad que rige el fútbol.

"Pienso que debería haber algunos (asistentes) adicionales", agregó. Blatter dijo que el asunto se discutiría el miércoles en una reunión extraordinaria del Comité Ejecutivo de la FIFA. Si la entidad decide seguir adelante con el plan, seguramente el mismo sería aprobado en marzo por el Consejo Internacional que dictamina las reglas, para que pueda entrar en vigencia en el Mundial de Sudáfrica, que comienza en junio.

Como siempre, Blatter descartó el uso de tecnología o repeticiones de video para asistir a los árbitros, aunque indicó que el comité discutiría la disposición de autoridades adicionales detrás de cada arco.

El sistema está siendo experimentado actualmente en la Liga de Europa, la ex Copa UEFA. Blatter señaló que el asunto, que llamó control de partidos, tenía que ser considerado por el comité ejecutivo.

"Todos están preguntando qué es o qué no es juego limpio. Cuando vemos a un jugador usando sus manos, eso es trampa", sostuvo.

"Hay una falta de respeto y disciplina de los jugadores porque hacen trampa con las manos, tomándose de la casaca, tirándose al suelo, son seres humanos tratando de sacar ventaja", continuó, anticipando que tal vez podría sumarse un asistente más para ayudar al árbitro a controlar el juego.

Blatter también manifestó que la FIFA reconsiderará el modo de disputa de los repechajes para determinar qué equipos clasifican.

"Hay diferentes formatos en distintos continentes, pero si todo se reduce a un partido final de repechaje para decidir si uno está adentro o afuera, eso no debería ser el espíritu de la Copa del Mundo", remarcó el presidente del organismo.

"Hay mucha presión en jugadores, técnicos y árbitros o presidentes. No se trata sólo de poner fin a la clasificación al Mundial con un solo partido y en eso es en lo que debemos pensar", añadió.