La Argentina es el segundo país de Lationamérica en cantidades de computadoras hackeadas, aún sin que sus dueños lo sepan, según el raking de una empresa de seguridad digital.

Cuanto más grande son las redes de usuarios, más amplio es el capo de trabajo de los hackers, que se juntan en bandas para tomar cuales piratas cibernéticos miles de equipos locales, informó el diario Clarín. Una vez que el hacker tiene control de una red puede alquilarla o venderla a otro hacker.

Al parecer, esto hace que la Argentina se ubique justo detrás de Brasil, que lidera el ranking de los más hackeados con un 42 por ciento de afectados. Lo llamativo es que, si bien el 17 por ciento de usuarios argentinos tienen hackeadas sus máquinas, la mayoría no lo sabe, según el estudio realizado por la empresa de seguridad virtual Symantec.

Un hacker puede ser el origen de los cientos de mails basura, así como también de que el usuario no pueda acceder a ciertas páginas de Internet o que se le capturen números de softwares legales para legitimar programas truchos en el mercado negro.

En realidad, el alto porcentaje de máquinas hackeadas, o "tomadas", se debe al tamaño de la red de usuarios local, la segunda más grande de la región. Los hackers construyen sus redes piratas a través de programas llamados "bot" que se propagan por la red y permiten que el hacker controle el equipo a distancia. Actualmente hay 50 mil sistemas afectados en el país, pero muy pocos usuarios lo notan.

"A una máquina tomada también se le pueden robar claves de tarjetas de crédito o del homebanking", explicó al diario Maximiliano Cittadini, quien se apresuró a aclarar que no es lo usual.

"El bot puede llegar en un correo electrónico o estar oculto en sitios de Internet contaminados", explicó Sebastián Bortnik, analista de seguridad de ESET. También puede pasar que se pasen a través de un software falso, una suerte de antivirus trucho que en realidad instala el bot.