"Por supuesto", respondió el designado obispo de Puerto Iguazú, monseñor Marcelo Martorell, cuando se le preguntó si el gobierno de Carlos Rovira en Misiones puede equipararse a una dictadura.

También se mostró "de acuerdo" con la candidatura de monseñor Joaquín Piña a convencional constituyente en Misiones.

"Estoy de acuerdo con lo que hace y ojalá le vaya bien", señaló Martorell, actualmente párroco del Corazón Eucarístico de Jesús, en la ciudad de Córdoba, y designado para reemplazar a monseñor Piña en el gobierno de la diócesis de Puerto Iguazú.

El prelado aclaró que Piña no sufrió un "desplazamiento" ya que "el año pasado presentó su renuncia" ante El Vaticano por haber
cumplido 75 años.

"Ya tenía presentada la renuncia e inclusive insistió para que le aceptaran la renuncia cuanto antes así podía dedicarse a la constituyente más tranquilamente", explicó.

En declaraciones a Radio 10, Martorell señaló que "no todos tenemos el mismo carácter, ni las mismas virtudes", aunque avaló la candidatura de Piña.

"La Iglesia siempre estuvo en las leyes fundamentales del país, en todas las Convenciones Constituyentes hubo un hombre de la Iglesia y esto no nos tiene que extrañar", indicó.

Además, tras calificar de "complicada" la relación entre la Iglesia y el Gobierno nacional, el purpurado destacó que su posición es "muy cercana" a la del cardenal Jorge Bergoglio.

"Somos muy buenos amigos. Es un gran obispo", destacó en referencia al arzobispo porteño y presidente de la Conferencia Episcopal.