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River recuperó parte de su memoria y venció al "rojo"
En el Monumental y con goles de Barrado y Falcao García, el equipo "millonario" le ganó el clásico a Independiente por 2-0. Ambos conjuntos fallaron un penal. Increíble
24 de mayo de 2009
River jugó en buen nivel y venció a un Independiente que no encuentra el rumbo por 2 a 0, en otro encuentro correspondiente a la 15ta. fecha del torneo Clausura.
Los goles del equipo local los convirtieron Diego Barrado, de media distancia, y Radamel Falcao, de cabeza, a los 30 y 37 minutos del primer tiempo, respectivamente.
En la segunda parte, el colombiano de River tiró un penal por arriba del travesaño y Daniel Vega le atajó otro remate desde los doce pasos a Daniel Montenegro.
Las pálidas realidades de River e Independiente chocaron en el estadio Monumental, que presentó un buen marco, y los protagonistas no desentonaron más allá de la crisis futbolística que comparten.
El entrenador de River, Néstor Gorosito, dispuso el retorno de Cristian Fabbiani y cambió al sistema 4-2-2-2, con Diego Buonanotte y Mauro Díaz, encargados de una generación de juego que se caracterizó por una desfachatez propia de la juventud de los ‘Enanos’.
Por su parte, Américo Gallego dispuso cambios como en cada fecha del Clausura, en la búsqueda de un Independiente competitivo para el segundo semestre, algo que a esta altura parece una utopía si no llegan refuerzos de relieve.
En la primera etapa, la propuesta del conjunto de Avellaneda pasó por esfuerzos individuales, que jugaron muy lejos de Daniel Vega.
Sin embargo, la primera aproximación interesante fue del equipo visitante, que por medio de Federico Mancuello obligó a la buena respuesta del arquero de River.
A continuación llegó la respuesta de Fabbiani, quien no gravitó más allá de aguantar la pelota, definiendo bajo, cruzado, fuerte y desviado.
A los 13’, Leandro Gioda lo tuvo de cabeza tras un centro de Leonel Ríos, en la que fue la última llegada de Independiente en la etapa inicial.
Mauro Díaz, primero, y Buonanotte, después, perdieron la ventaja para River en una misma situación a los 15’.
Los volantes de creación ‘millonarios’ necesitaron compañía para que River encuentre la ventaja merecida, y la encontraron a los 30 minutos, en una acción individual de Barrado, quien definió desde media distancia al palo derecho de Walter Assmann.
Pero el ex Olimpo no se durmió en los laureles y puso un centro exacto
a la cabeza de Falcao para vulnerar al arquero de Independiente y establecer el 2-0 con el que River se fue al descanso merecidamente.
La mala tarde de los de Avellaneda quedó en evidencia a los 10 minutos del complemento, cuando el ingresado Leonel Núñez remató desde la izquierda, la pelota cruzó todo el arco y encontró la cabeza de Daniel Montenegro para que el balón se estrelle en el travesaño, en la jugada más clara del encuentro a favor de Independiente.
Ese fue el mejor momento de los dirigidos por Gallego, que pudo descontar por un cabezazo de Lucas Pusineri, finalmente en posición adelantada.
Después se iba a dar el momento de mayor emotividad, primero con un penal de Assmann a Falcao que el colombiano tiró afuera después de tropezarse ante el mal estado del campo de juego, y con una falta inexistente de Danilo Gerlo a Núñez dentro del área ‘millonaria’ que Vega le tapó a Montenegro.
A partir de ahí, Independiente se desmoralizó, creció Fabbiani aguantando la pelota, y River fue a buscar un tercer gol que hubiera merecido pero nunca llegó.
Estos tres puntos le dan a Gorosito tranquilidad después de una semana convulsionada por supuestas diferencias con el plantel, mientras que para Gallego nada cambió y sumó más preocupación.
Los goles del equipo local los convirtieron Diego Barrado, de media distancia, y Radamel Falcao, de cabeza, a los 30 y 37 minutos del primer tiempo, respectivamente.
En la segunda parte, el colombiano de River tiró un penal por arriba del travesaño y Daniel Vega le atajó otro remate desde los doce pasos a Daniel Montenegro.
Las pálidas realidades de River e Independiente chocaron en el estadio Monumental, que presentó un buen marco, y los protagonistas no desentonaron más allá de la crisis futbolística que comparten.
El entrenador de River, Néstor Gorosito, dispuso el retorno de Cristian Fabbiani y cambió al sistema 4-2-2-2, con Diego Buonanotte y Mauro Díaz, encargados de una generación de juego que se caracterizó por una desfachatez propia de la juventud de los ‘Enanos’.
Por su parte, Américo Gallego dispuso cambios como en cada fecha del Clausura, en la búsqueda de un Independiente competitivo para el segundo semestre, algo que a esta altura parece una utopía si no llegan refuerzos de relieve.
En la primera etapa, la propuesta del conjunto de Avellaneda pasó por esfuerzos individuales, que jugaron muy lejos de Daniel Vega.
Sin embargo, la primera aproximación interesante fue del equipo visitante, que por medio de Federico Mancuello obligó a la buena respuesta del arquero de River.
A continuación llegó la respuesta de Fabbiani, quien no gravitó más allá de aguantar la pelota, definiendo bajo, cruzado, fuerte y desviado.
A los 13’, Leandro Gioda lo tuvo de cabeza tras un centro de Leonel Ríos, en la que fue la última llegada de Independiente en la etapa inicial.
Mauro Díaz, primero, y Buonanotte, después, perdieron la ventaja para River en una misma situación a los 15’.
Los volantes de creación ‘millonarios’ necesitaron compañía para que River encuentre la ventaja merecida, y la encontraron a los 30 minutos, en una acción individual de Barrado, quien definió desde media distancia al palo derecho de Walter Assmann.
Pero el ex Olimpo no se durmió en los laureles y puso un centro exacto
a la cabeza de Falcao para vulnerar al arquero de Independiente y establecer el 2-0 con el que River se fue al descanso merecidamente.
La mala tarde de los de Avellaneda quedó en evidencia a los 10 minutos del complemento, cuando el ingresado Leonel Núñez remató desde la izquierda, la pelota cruzó todo el arco y encontró la cabeza de Daniel Montenegro para que el balón se estrelle en el travesaño, en la jugada más clara del encuentro a favor de Independiente.
Ese fue el mejor momento de los dirigidos por Gallego, que pudo descontar por un cabezazo de Lucas Pusineri, finalmente en posición adelantada.
Después se iba a dar el momento de mayor emotividad, primero con un penal de Assmann a Falcao que el colombiano tiró afuera después de tropezarse ante el mal estado del campo de juego, y con una falta inexistente de Danilo Gerlo a Núñez dentro del área ‘millonaria’ que Vega le tapó a Montenegro.
A partir de ahí, Independiente se desmoralizó, creció Fabbiani aguantando la pelota, y River fue a buscar un tercer gol que hubiera merecido pero nunca llegó.
Estos tres puntos le dan a Gorosito tranquilidad después de una semana convulsionada por supuestas diferencias con el plantel, mientras que para Gallego nada cambió y sumó más preocupación.