Con el objetivo de mejorar las relaciones entre ambos países, lesionadas tras la expropiación de Aerolíneas Argentinas y la estatización de la AFJP, Cristina Kirchner inició hoy sus actividades oficiales en España. Esta mañana, la Presidenta fue recibida por los reyes de España, Juan Carlos de Borbón y Sofía, en el palacio El Pardo, en Madrid.

Desde allí, Cristina se trasladó al Ayuntamiento de Madrid para reunirse con el Alcalde Alberto Ruiz Gallardón. Después de que el funcionario le entregara las "llaves de oro" de la ciudad, la Presidente habló ante los 55 concejales representantes del Partido Popular, del Partido Socialista y de la Izquierda Unida y repudió el atentado ocurrido en Madrid.

"Quiero solidarizarme con ustedes y repudiar el episodio que ha tocado vivir esta mañana en Madrid. Debemos condenar las actitudes como esta que tienen por sentido quebrar la fortaleza, no ya de la democracia, sino de la ciudadanía", señaló.

Los funcionarios kirchneristas confían en que el tema más espinoso de los últimos meses, la expropiación de Aerolíneas Argentinas, no genere mayores disgustos.

A la tensión que surgió en la relación bilateral cuando se estatizaron las AFJP, donde los bancos españoles tenían intereses, se sumó después la de Aerolíneas al grupo Marsans.

Pero ahora al menos se sabe que aquí cayó bien, o se aceptó como un gesto, que se reanudaran las conversaciones con Marsans para que el traspaso de la empresa tenga un cierre más prolijo.

De hecho Cristina tiene agendada para mañana reuniones privadas con las principales empresas españolas con inversiones en Argentina: Telefónica, Gas Natural, Abertis, Santander, BBVA. Pero no con Marsans.